Infoxicación digital

Resaltar el contenido de gran referencia al momento de discernir nuestras indagaciones

La infoxicación o exceso de información a que estamos siendo sometidos con un bombardeo digital desde cualquier lugar, por cualquier motivo o en cualquier momento produce una serie de estímulos.

Tanta información en redes sociales, portales web, correos electrónicos, entre otros operadores digitales que gestionamos de forma inadecuada, repercute negativamente en nuestra vida. Surge una pregunta clave para combatirla, saber si ¿quiero estar informado o no?

Por lo general acudimos a navegadores informáticos como los buscadores de Google o Yahoo, que son simples robots que presentan información guardada en sus bases de datos -tienen indexadas más de un billón de páginas web-, siendo parte del almacenamiento que existe en Internet.

Preguntarnos: ¿qué hago con la información que encontré por casualidad y no es de relevancia? Si tal trabajo es de nuestro interés, debemos almacenarlo, pues tal vez en un futuro tengamos que ocuparlo. O también podemos preguntarnos ¿cómo busco y filtro la información, al existir billones de páginas web? ¿Dónde descubrir lo que nos concierne, y no lo que no nos interesa de un tema de estudio? Resaltar el contenido de gran referencia al momento de discernir nuestras indagaciones.

En conclusión, la infoxicación nos muestra abundante información, tanta, que si no eres capaz de distinguir lo bueno de aquello que debe ser omitido, no te permitirá obtener data adecuada, ni reflexionar y peor comprender el tema concreto que es de tu interés.

Roberto Camana-Fiallos