La etiqueta y la corrupción
Hace décadas se comercializaba un producto alcohólico conocido como aguardiente La Perla, cuyo envase de vidrio verde tenía forma ovalada. Los consumidores al solicitarlo, pedían: deme un aguacate y dos tizas ( una botella de La Perla y dos cigarrillos). Ese consumo se fue distorsionando con el de alcohol de caña de azúcar salido directamente del trapiche y del serpentín, que era mucho más barato y de mejor sabor, conocido como puro. Pero como no tenía marca o etiqueta, los avivatos comenzaron a adulterarlo o bautizarlo con agua, y para disimular la potencia, le aumentaban alcohol industrial. La consecuencia: el consumo de ese producto, dizque artesanal, sin etiqueta, produjo una cantidad grande de ciegos y muertos. Igual resultado se tiene con los afiliados al Seguro Campesino, endosados al IESS, que en lugar de aportar $ 90 mensuales que corresponden al Salario Mínimo Vital que pagan los afiliados al IESS, solo pagan $ 2 y como no tienen la etiqueta del “patrono”, Ministerio de Agricultura, allí se produce la adulteración de la afiliación, promocionada por el anterior gobierno y el actual. La población rural para acceder a servicio casi gratis del IESS, se afilian y se produce la corrupción del sistema previsional de seguridad social. Igual sucede con los enfermos de males catastróficos. El Gobierno, al no tener dinero para paliar el problema firma carta de intención con los entes de crédito y la pelotita del problema que la resuelva el que va a entrar (se decidirá en las próximas elecciones), y con leguleyadas le quieren hacer comulgar al pueblo de que con una carta de compromiso van a honrar el 40 %, para seguirle sacando plata al IESS. ¿Qué tal si le ponen la etiqueta de patrono al Ministerio de Agricultura a los del seguro campesino, y a los que reciben el bono de pobreza y otros de auxilio al Ministerio de Salud, lo que ayudaría a ejercer control para evitar que se utilice el sistema para sustentar la corrupción. Será ejemplo de que en realidad se quiere actuar en favor de los intereses del país y no con fines eleccionarios. Mucho cuidado en comprometer los fondos del Seguro Social en proyectos de inversión de construcción, que ya ejecutados no tienen quien los compre por estar mal concebidos. La única forma de remediar el sistema estructural para inaugurar la independencia de poderes y erradicar el centralismo es despartidizando el sistema electoral y programarlo por estratos de edades, donde cada estrato escoja a los candidatos más preparados para que no tengan más que un asistente técnico de 4to nivel de educación. De la crisis se sale con los mejores, sin bandera política.
Salvador Loffredo A.