Cositas de la FIFA

El equipo ecuatoriano tal como está jugando es más equipo que los tres de su grupo

Nuestro país tenía que enfrentarse al anfitrión en el partido inaugural del Mundial de Catar y en último momento la FIFA lo relevó para que sea el tercer compromiso de la fecha. Y sin más escrúpulo que su decisión como justificación del cambio de orden de la programación, en un comunicado argumenta: “optimización en beneficio y comodidad de los espectadores, equipos, medios y la audiencia global”. Cambió el horario y sede del partido entre Catar y Ecuador. Solo son pretextos para beneficiar directamente al país anfitrión. El exseleccionador del Ecuador, Luis Fernando Suárez, menciona que en el mundial 2006 Carlos Salvador Bilardo dijo: “El primer partido vale oro puro”. El no haber permitido la FIFA que nuestro país abra la fecha inaugural en Doha, la capital, con el anfitrión, inclina la balanza hacia el dueño de casa, pues este prácticamente juega con el compromiso de justificar el porqué es el organizador y quedar bien. Aquí entra a funcionar el dominio de las facultades psicológicas y la psicodinámica física y mental en los espectadores y en los futbolistas. En todo juego inaugural el adversario del anfitrión tiene no menos de 20 % de posibilidades de capitalizar las emociones negativas que generan esa ansiedad de lograr el triunfo. Tras dos encuentros la tensión dinámica se desinhibe y ya es otra la motivación. No debemos dar importancia a esta estrategia localista. El equipo ecuatoriano tal como está jugando es más equipo que los tres de su grupo.

César Antonio Jijón Sánchez