¿Conflicto no internacional?

Leyes universales y convenciones dicen que con diálogo, empatía, ganar-ganar; la historia de la humanidad dice que de otra forma.

Lo que está viviendo Ecuador es una tormenta perfecta con ataque ¿sistemático o casual? a toda la estructura del país: económico, mediante el paro indígena, que amenaza con otro más; político, mediante boicot, trabas, conflictos desde el Congreso al Ejecutivo; social, mediante accionar narcodelicuencial. ¿Tiene algo que ver el juicio a Nilsen Arias? ¿No existió estímulo emocional con el triunfo de Lula? (en el Pacífico solo Ecuador no es rojo, y “ya es hora” de que lo sea). Quizá solo sea teoría de conspiración, pero la sociedad ecuatoriana se está hundiendo y los actores políticos (principalmente congresistas) y un sector extremista indígena siguen cavando la tierra. Tras una tormenta viene la calma… pero todo queda destruido; la sociedad no saldrá indemne. Lo más frustrante es que esta pelea por el poder no es por mejorar la sociedad, “por los pobres”, “por la justicia social”; es por megalomanía, codicia, impunidad. ¿Como se resolverá? Leyes universales y convenciones dicen que con diálogo, empatía, ganar-ganar; la historia de la humanidad dice que de otra forma.

David E. Ricaurte Vélez