La ciudadanía está enojada. No acepta que la administración pasada, por pedido de los servidores turísticos de Playas, haya demolido un tramo del muro del malecón, alegando que necesitaban escaleras que hasta la fecha se han construido.

“Lo que puedo decir es que eso fue un atentado contra el ornato. Se ve todo tan mal. Jamás debió tomarse esa decisión. Hoy hay incluso más riesgo de caerse”, se quejó el turista Joffre Nájera al observar los seis tramos “dizque intervenidos” que, a su juicio, se han convertido más en un problema a la movilidad.

Que las escaleras son parte de la estructura del malecón y que eran necesarias para bajar a la playa; que los ingresos estaban distanciados y que el turista tenía que dar muchas vueltas para llegar al mar y que no había acceso directo a los módulos de los comedores y que los favorecidos eran apenas unos cuantos espacios, argumentaron los servidores turísticos de la zona ahora afectada para lograr tener luz verde a su petición.

El exalcalde Dani Mite dispuso la demolición en una extensión de dos cuadras pero nunca construyó las escaleras. Por lo que fueron los comerciantes cuyos negocios están cerca de los muros demolidos, quienes las construyeron de forma artesanal e hicieron camineras en la arena pero con el material que hallaban y de forma desordenada, reconoce Rosa Tigreros, dueña de un comedor.

(Lo invitamos a leer: Playas: Tres décadas sin una ordenanza de turismo)

Los servidores turísticos dicen que el alcalde Gabriel Balladares les ha prometido construir las gradas. Mario Freire, director de Turismo, aseguró que ya se está desarrollando el diseño para levantarlas, aunque no especificó cuándo estarán listas y ordenarán el área.

Para la ciudadanía sin embargo, no hace falta que haya más escaleras, puesto que en el malecón, de casi dos kilómetros de extensión, hay ya unas 20 escalinatas que conducen al mar en una extensión de 800 metros.

“A mí me parece que es innecesario. Los servidores turísticos quieren que haya cada cinco metros una escalera, es ilógico. Si hay un malecón, es para caminar. Lean bien, caminar. En lugar de poner tanta cosa, coloquen más áreas verdes. Eso es lo quiere el turista. Un espacio con sombra, lleno de árboles, palmeras, bancas, una pileta que atraiga. Luz en el área. En fin, mobiliario que aporte. Lo digo como turista”, señaló Danilo Llerena, guayaquileño.

(Lo invitamos a leer: La lona que cubre el malecón de Playas se desplomó tras el último aguacero)

Mónica Carrasco, cuencana que visita con frecuencia el balneario, comparte la opinión. “Yo no quiero un malecón repleto de graderías. Lo ideal es que el espacio nos invite a caminar y que sea atractivo, seguro... Y eso, lo principal, no existe”, denunció.  

Para leer más información de este tipo, ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!