Crear nuevas opciones de celebraciones es la meta que se han propuesto los diversos sectores que son parte de la industria del ocio, que por la pandemia de la COVID-19, mantienen sus negocios con cero o con pocos ingresos económicos.

Una de las propuestas es la caravana party. En Guayaquil ya se han hecho; uno de los negocios que lo ha realizado es Eva Planner, cuya propietaria, Evelyn Sánchez, explicó a EXPRESO de qué trata este tipo de fiestas.

“Se decora la fachada de la casa donde vive el anfitrión del evento, se pone plataforma y parlante; entonces se organiza para que los invitados lleguen en carro y den tres vueltas”, dijo Sánchez.

Agregó que cada invitado puede llevar letreros o decorar su carro, “ y que para mantener las medidas de bioseguridad hay una persona que se encarga de evitar que se rompa el distanciamiento físico y se asegura que todos tengan puestas bien las mascarillas”.

• ¿Qué se hace en cada vuelta?

- En la primera, es un desfile para apreciar la creatividad en decorar los carros. En la segunda vuelta el invitado entrega el regalo y una persona correctamente protegida entrega tortas, bocados o comida que se han preparado con toda la higiene y que están debidamente empacadas. En la tercera, se hace la foto de cada carro y se retiran.

Por su parte los chef están creando las porciones personalizadas para cada invitado. “Al final del 2019, en la Escuela Culinaria de las Américas, creamos la cafetería New York Coffee. Funciona en la misma escuela, en Francisco Boloña 205 y Gilbert Pontón. En este tiempo de coronavirus ofrecemos los dulces empacados, para que quienes hacen fiestas virtuales o en las caravana party, todo listo para entregarlos a los invitados. Esta es nuestra opción para aportar en la reactivación económica de la ciudad. Además la cafetería está abierta, con el aforo reducido; y en la escuela estamos dando clases virtuales”, manifestó Alexandra Martillo, gerente ejecutiva de la Escuela Culinaria de las Américas

La propuesta de los músicos y empresarios que ofrecen el servicio de audio es que se permita en los salones de eventos que las personas bailen sin sacarse la mascarilla. Este fue uno de los planteamiento que hicieron Roberto Bolaños, dueño de la banda CityBand; Stephanie Braber, organizadora de eventos y David Baquerizo, experto en seguridad, en la reunión que tuvieron con la alcaldesa Cynthia Viteri.

Otras de las sugerencias que han hecho a la alcaldía y al COE cantonal es que los invitados se realicen un examen 48 horas antes de la reunión social.

“Hemos también planteado que se pongan dos pistas para bailar, para evitar la aglomeración; pero que los invitados siempre tengan puestas sus mascarillas. El único momento que se la puede retirar es para comer”, agregó Bolaños.

Cuando la música sea en vivo, otra idea dada es que la plataforma sea más alta para desanimar al invitado la tentación de subirse allí y se mantenga la distancia entre la banda de músicos y los presentes.

Las locaciones que son amplias piden que se permita tener un aforo de un 30 % en relación al tamaño del lugar, porque hacer una reunión para 25 personas en una localidad de lujo se vuelve más caro. “Por ejemplo en la finca San Andrés, solo para el mantenimiento necesitamos cada mes 10.000 dólares y en el último mes los ingresos no llegan ni a un 30 % del monto que requerimos ”, dijo Stephany Alvarado, representante de la finca San Andrés, ubicada en la vía a la costa.

Alvarado agregó que ellos han reducido el costo del alquilar del espacio de 1.400 dólares a 800 dólares, pero aún así resulta ser un costo alto si aforo es solo de 25 personas.

Por eso es que Xavier Zavala, presidente de la Asociación de Planes y Proveedores de Eventos de Ecuador, plantea que se permita las fiestas en salones especializados con un aforo que pueda ir subiendo, según mejora la situación con la pandemia. Además se suma al planteamiento de Margarita Rugel, dueña de la marca ExpoBoda, de que los eventos sean planificados por un organizador de eventos, que esté calificado en medidas de bioseguridad; y que sea quien deba pedir los permisos debidos al municipio.

Zavala también anima a que las autoridades piensen en todos los proveedores que están detrás de un evento. Por ejemplo el agricultor que cultiva la rosa, el conductor que trae esa flor desde la Sierra a la Costa y la persona que arma la decoración. Solo allí hay decenas de personas, cuyo trabajo depende de una fiesta y que ahora no tienen ingresos por este rubro.

La alcaldesa, Cynthia Viteri, ha dicho que está dispuesta a escuchar todas las sugerencias que vengan para ganar la batalla de reactivar económicamente a Guayaquil, por ello habrá una segunda reunión con el sector productivo la próxima semana.

Desde el martes de esta semana el cabildo ha realizado reuniones para escuchar las sugerencias, han asistido entre ellos los hoteleros, dueños de restaurantes, la industria de eventos, músicos y chefs. Unos han hablado directamente con la alcaldesa y otros con Gloria Gallardo, presidenta de la Empresa Pública Municipal de Turismo, Promoción Cívica y Relaciones Internacionales de Guayaquil.

AMPLIAR EL AFORO

En la reunión de esta mañana del miércoles 12 de agosto, de la alcaldesa, Cynthia Viteri, y el COE cantonal, Allan Hacay, director de Gestión de Riesos, habló sobre un planteamiento al COE, para que se autoricen  las reuniones familiares o de ejecutivos en hoteles y salones de eventos, con aforo máximo del 30 % de la capacidad del salón, durante el semáforo amarillo, manteniendo las medidas de bioseguridad y distanciamiento.

En caso de exceder las 25 personas se deberá notificar previamente al COE cantonal el plan de contingencia y bioseguridad a cumplir; asimismo para eventos públicos en espacios abiertos.