En China, otras dos posibles vacunas contra el coronavirus han comenzado los ensayos clínicos en humanos. Estos proyectos se suman de dos a otras tres fórmulas que ya están en dicha etapa, entre más de 70 laboratorios que han iniciado estudios por lograr la defensa contra la enfermedad.

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Se trata de dos vacunas inactivadas, es decir, consistentes en microorganismos que se han matado a través de procesos físicos o químicos.

La primera, que obtuvo la licencia para proceder a ensayos clínicos el pasado domingo, ha sido desarrollada por el Instituto de Virología de Wuhan -la ciudad donde se originó la pandemia- de manera conjunta con la sucursal en esa misma urbe de la empresa Sinopharm.

La segunda es el resultado del trabajo conjunto de varias empresas, con Sinovac Research & Development a la cabeza. Esta empresa es una subsidiaria de Sinovac Biotech, que trabajó también en una vacuna contra el SARS en 2003.

Según Caixin, el proyecto de Sinopharm -que cuenta con el apoyo económico del Ministerio de Ciencia y Tecnología de China- probará la vacuna en 1.396 voluntarios reclutados en la provincia de Henan en sus dos primeras fases, que se prevé duren hasta el 10 de noviembre de 2021.

A mediados de marzo, las autoridades chinas aprobaron el comienzo de los ensayos clínicos de otra vacuna contra el coronavirus desarrollada por la Academia Militar de Ciencias.

En los últimos días, la Organización Mundial de la Salud publicó un reporte sobre el estado de los proyectos científicos, donde indicó que 70 iniciativas están activas, de las cuales tres están en fase clínica.

La que lleva la delantera en el proceso clínico es una vacuna experimental desarrollada por la empresa CanSino Biologics Inc  y el Instituto de Biotecnología de Beijing, que ya está en la segunda fase.

Hasta la fecha, el Covid-19 ha infectado a más de 1,9 millones de personas en todo el mundo, de las cuales han perdido la vida más de 120.000 personas.