Se suman voces en contra de la propuesta de la presidenta de la Asamblea Nacional, Elizabeth Cabezas, acerca del retiro del requisito de PHD para ser rector y profesor principal en las universidades.

El planteamiento consta en una reforma a la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES) presentado por la asambleísta. Pero la normativa vigente determina que el PHD es un requisito para que un académico pueda ocupar esos cargos.

Las críticas surgen desde los organismos que rigen el sistema universitario. El titular de la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt), Adrián Bonilla, expresó su rechazo a la propuesta y dijo que no debería ser tomada en cuenta en la Comisión de Educación.

Posición que dio a conocer durante un encuentro en el que participaron rectores de diferentes universidades públicas, privadas y cofinanciadas, así como las autoridades del Sistema de Educación Superior, que se cumplió en Quito.

Para el académico, la eliminación de este requisito “sería un retroceso” en la educación superior, puesto que no es únicamente la posesión de un título, sino la cimentación de requisitos que tienen que ver con docencia, investigación y estudios.

“La anulación del grado doctoral implica una decadencia de la calidad. No tendría sentido seguir promoviendo este tipo de estudios porque no habría una necesidad latente”, explicó.

Para la presidenta del Consejo de Educación Superior (CES), Catalina Vélez, el ejercicio docente ha de estar anclado a la investigación y vinculados con la sociedad. “La formación doctoral, por su enfoque filosófico e investigativo, posibilita que los profesores tengan experiencia para direccionar su cátedra”.

Criterios con los que coincide Ana Lucía Ruano, titular subrogante del Consejo de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior (Caces). Aseguró que la LOES, en su artículo 93, establece que el principio de calidad consiste en la búsqueda constante y sistemática de la excelencia, pertinencia y desarrollo del pensamiento, por lo cual, “retirar el doctorado sería un retroceso”.

En el país existen 3.824 profesores con PHD inscritos, algunos han sido formados con inversión del Estado.

Mario Echeverría, representante de la Asociación de Docentes de la Universidad de las Fuerzas Armadas, compareció ante la Comisión de Educación y pidió que, para ser categorizados como docentes principales, en calidad de rector y vicerrector de esta institución educativa, se establezca el requisito de PHD.

Mencionó que existen intereses particulares generados por personas y autoridades externas, quienes vienen con su propia política de trabajo, lo cual genera inestabilidad en el aspecto económico y administrativo de la institución educativa superior.