Africa: mujeres en lucha sanitaria

Las Enfermedades Tropicales Desatendidas (ETD) afectan desproporcionadamente a mujeres y niñas. La Esquistosomiasis Genital Femenina (EGF) causa dolor intenso, sangrado y lesiones en más de 16 millones de mujeres y niñas en el África subsahariana. Las ETD tienen gran impacto socioeconómico de largo plazo en millones de mujeres y niñas, quienes reciben un estigma al punto de ser incapaces de casarse o quedar abandonadas por sus cónyuges. Desde el 2000 se han donado suficientes productos farmacéuticos para cinco mil millones de tratamientos preventivos contra las ETD. Y muchas personas ahora reconocen que su control, y eventualmente su eliminación, serán esenciales para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para áreas tan diversas como nutrición, educación, salud, agua, saneamiento e higiene, y crecimiento económico. Los ODS se basan en el principio de “no dejar a nadie atrás” y no pueden considerarse un éxito hasta que se hayan cumplido en todas partes y para todas las personas, incluidas mujeres y niñas. En particular, el ODS 5 llama al mundo a “lograr la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y niñas” para 2030. En África, a menudo las mujeres se ven privadas de sus derechos, aunque representan más de la mitad de la población del continente. Necesitamos mejorar nuestra comprensión de cómo funcionan las relaciones de poder de género y abordar de frente su dinámica social. Debido a que mujeres y niñas en edad fértil sufren desproporcionadamente de los efectos sociales y de salud de las ETD, es sumamente importante que se incluyan en las intervenciones de política sanitaria a gran escala que se propongan. Y, más allá de hacer de las mujeres el foco de los programas de ETD, debemos reconocer que jugarán un papel central en el avance de la agenda de desarrollo sostenible. Necesitamos empoderar a mujeres y niñas para que promuevan y lideren los esfuerzos de movilización social en África. Ha llegado el momento de desarrollar herramientas que apunten a políticas más innovadoras. Necesitamos urgentemente contar con enfoques integrados, interprogramáticos e intersectoriales que den cuenta de sus dinámicas social, económica y etiológica. Y necesitaremos la plena participación de las comunidades más vulnerables. Sin ellas, ningún programa dirigido a erradicar las ETD puede tener éxito en última instancia. Ahora que ha surgido una colaboración internacional cada vez mayor, tenemos una oportunidad única de poner fin a estas enfermedades debilitantes de una vez por todas. En 2016, la Oficina Regional de la OMS para África lanzó el Proyecto Especial Ampliado para Eliminación de Enfermedades Tropicales Desatendidas (Espen), que proporciona a los países africanos herramientas de asistencia técnica y recaudación de fondos para combatir los cinco ETD que pueden prevenirse con quimioterapia: oncocercosis, filariasis linfática, esquistosomiasis, helmintiasis transmitida por el suelo y tracoma. El Espen representa un esfuerzo por reunir a los gobiernos, la comunidad de salud pública mundial y otras partes interesadas. Nuestra meta es fortalecer alianzas diseñadas específicamente para eliminar las ETD. El Espen apoya activamente programas de lucha contra las ETD a nivel nacional, creados para romper el ciclo de pobreza que estas causan y sostienen. Seguiremos fomentando enfoques participativos que incluyan a las poblaciones más vulnerables (especialmente mujeres y niñas) en la lucha contra las enfermedades. La única manera de asegurar el éxito a largo plazo es capacitar a los más afectados.

Matshidiso Moeti

Es directora regional para África en la Organización Mundial de la Salud.