Dos horas duró la reunión que sostuvo el alcalde recién posesionado de Quito, Pabel Muñoz con los representantes de la empresa Metro de Quito y la operadora Transdev y Metro de Medellín, para dilucidar las causas por las que se suspendió la operación de este sistema moderno de transporte que arrancó el pasado 2 de mayo de 2023 y duró solo nueve días. 

A través de un comunicado oficial, el burgomaestre informó que se "evidenció la desconexión completa entre las partes involucradas y la falta de claridad de una hoja de ruta consistente. Por otro lado, se ratificó que fue un desacierto haber apresurado el inicio de las operaciones con un cobro a los ciudadanos".

La tarifa establecida fue de 45 centavos por viaje. La capacidad de traslado llegó a 25 mil pasajeros, cuando este medio de transporte fue diseñado para llevar a 400 mil usuarios, por día. 

Entre las acciones que se ejecutarán para solventar el malestar está la actualización del cronograma, donde se identificaron retrasos. Aquí se deberá aclarar los plazos de ejecución de cada proceso. 

Revisar los elementos contractuales en relación al alcance en las pruebas de integración es otro aspecto planteado. La integración de la “Tarjeta de la ciudad” como prioridad en el nuevo sistema integrado de recaudo que también deberá incluir al resto de corredores de transporte municipal es un tercer elemento. 

Con respecto a la inquietud de la ciudadanía, sobre las fechas tentativas para volver a utilizar el servicio de transporte, el Cabildo informó que se realizarán pruebas de funcionamiento con grupos prioritarios como estudiantes, docentes, entre otros. Las fechas para el arranque de esta fase y los horarios todavía están en proceso de elaboración y se darán a conocer en los próximos días.