En un centro comercial en El Tejar, en la zona céntrica de la capital, los vendedores tienen miedo de realizar sus actividades, luego de que, desde la semana pasada, un grupo de sujetos armados con cuchillos y machetes intentaran intimidar a los vendedores para que les pagaran una cuota ‘a las bravas’.

Un comerciante de pantalones señaló que los agresores llegaron desde enero a extorsionar. Reconoce que por dos ocasiones les pagó lo que pedían para estar tranquilo. Sin embargo, luego de varias vacunas se cansó y decidió dar pelea a los extorsionadores.

Desde la semana pasada se han registrado grescas en todo el edificio. El domingo, el cuarto piso se convirtió en un mini campo de batalla en el que ni los maniquíes se salvaron.

Un video que fue facilitado por un comerciante muestra a dos grupos de personas que intentan agredirse con machetes y palos. La pelea dura más de cuatro minutos. Según los vendedores de esa zona, se produjo porque ellos no quisieron pagar la ‘vacuna’ que fue a cobrar un hombre que tenía un enorme cuchillo. “No podemos dejar que nos vean la cara”, comentó un vendedor de ropa.

En los exteriores del local la situación no es distinta. Un expendedor de jugos que camina por la calle Mejía contó que hace dos semanas llegaron cinco sujetos para intimidarlo. Rodearon su coche. Uno de ellos sacó un cuchillo y le dijo: “Debes pagar dos dólares diarios si quieres trabajar”. Luego le mostró un cuchillo que guardaba en su pantalón.

Desde ese día, el hombre ha dejado de vender en un solo sitio y se mueve por todo el Centro Histórico, para evitar ser presa de las bandas.

Los comerciantes mencionaron que durante las peleas escucharon gritar a los atacantes que pertenecían al grupo los Chicos Malos; otros comentaron que se trata de personas con tatuajes de los Vatos Locos.

Ante esta realidad, la Policía ha tomado acciones, según el coronel Patricio Vargas, subcomandante del Distrito Manuela Sáenz. Por ejemplo, destinaron más personal para el patrullaje interno y externo de estos centros comerciales. Existe una orden de servicio que diariamente debe presentar el jefe de este sector, con el cumplimiento de la presencia policial.