Ilusos los que todavía les creen

¿Así quieren que venga inversión extranjera, que se creen nuevas fuentes de empleo? No sigan engañando a la gente; ilusos los que todavía les creen

En este país todo puede suceder. Los 47 asambleístas de UNES y unos cuantos de Pachakutik pretendieron destituir al presidente aplicando el art. 130 numeral 2 de la Constitución, que señala: “Por grave crisis política y conmoción interna”. Dos párrafos después señala el mismo artículo: “para proceder a la destitución se requerirá el voto favorable de las dos terceras partes de los miembros de la Asamblea nacional”. Son 92 votos favorables que esos partidos políticos no tienen en la actualidad. La labor especifica de la Asamblea es legislar y fiscalizar. Hace poco se hicieron encuestas de opinión a la ciudadanía para conocer cómo piensan sobre el trabajo realizado hasta aquí por la actual Asamblea y su credibilidad, el resultado es apenas 12 %. Estos mismos asambleístas fueron los que aprobaron la amnistía para todos los que causaron destrozos, quema de la Contraloría, sabotaje a un canal privado de TV, golpes, maltratos y retenciones a periodistas, policías y militares, vandalismo, robos y saqueos, pérdidas económicas de $ 800 millones en octubre de 2019; todo esto en Quito y otras ciudades de la sierra. Los mismos actores protagónicos con el principal cabecilla de aquel entonces, que en junio de este año hicieron lo mismo. Según cálculos se han perdido alrededor de $ 950 millones. El país estuvo paralizado y ahora todos se lavan las manos, como que no ha pasado nada. ¿Cuándo disuelven la Asamblea, meten presos a los protagonistas principales y causantes del caos? El riesgo país sigue subiendo. ¿Así quieren que venga inversión extranjera, que se creen nuevas fuentes de empleo? No sigan engañando a la gente; ilusos los que todavía les creen.

Roberto Flores