Horror en las cárceles del país

Y que fiscales y jueces apliquen la justicia de conformidad al derecho legal, y no sin ética ni moral.

Los recientes hechos de sangre sucedidos simultáneamente en 3 recintos penitenciarios dejaron escenas macabras, terroríficas, insólitas, inconcebibles y aberrantes. No solo fueron fruto de enfrentamientos de bandas criminales internas, sino de la participación de grupos externos conectados con los reos. Esta sería una de las principales causas de la barbarie, donde la mayoría fueron decapitados, desmembrados, heridos, de la forma más vil y cruel. ¿Por qué el Estado perdió el control de las cárceles? Son muchas y múltiples las falencias en el sistema carcelario (SNAI). 1. No hay control estricto al ingreso de cuchillos, machetes, pistolas, granadas, teléfonos celulares de alta gama, droga, prostitución, entre otros. 2. El Estado no tiene instructivo ni consejo de seguridad activado permanentemente, y no que sirva únicamente para la manutención de los presos, sino que los celadores sean armados, preparados y bien remunerados. 3. Los directores no son especializados y tienden a ser susceptibles a la corrupción. Deberían ser parte de las soluciones: 1. Construir cárceles bien distribuidas para evitar el hacinamiento y la mezcla de PPL: drogadictos, asesinos, asaltantes, sicarios, violadores. Edificar cárceles subterráneas de máxima seguridad. 2. Crear un sistema de inteligencia penitenciario. 3. Protección interna y mantenimiento del orden público son funciones privativas del Estado a través de la Policía nacional; es recomendable al menos 4 policías por cada mil presos. 7. No existe un sistema verdadero de perfeccionamiento de vandalismo. 8. Que los abogados se abstengan de defender a criminales. Y que fiscales y jueces apliquen la justicia de conformidad al derecho legal, y no sin ética ni moral. El decreto de Estado de excepción carcelaria de Lenín Moreno fue fallido. Frente a este gobierno frágil, incapaz de articular un conjunto de acciones de prevención y afirmativas a la problemática social, le corresponde al siguiente gobierno diseñar y ejecutar una solución eficiente y una reforma del régimen penitenciario. Es tarea urgente.

Lic. Robespierre Rivas R.