Expreso publicó el 09-Oct-2021 sobre el ensayo efectuado por la banda de guerra integrada por los exalumnos del colegio Eloy Alfaro, como actividad previa al desfile por las festividades octubrinas.

La noticia me emocionó mucho y fui a verlos. Como testimonio digo que fue una decisión acertada, dado que el desempeño del cachiporrero fue regio, así como el compás y la coordinación de movimientos ofrecida a los espectadores; digno de reconocer. Su actuar es un tributo al colegio y a la educación. Los sonidos que producía la banda retumbaron en todo el sector pero a nadie molestó, simplemente porque estaba bien hecho.

Ellos son un ejemplo para las nuevas generaciones; a algunos jóvenes, al desempeñar la misma función, les falta ánimo.

Los espectadores de la marcha fueron adultos jóvenes y adultos mayores que residen en la cdla. 9 de Octubre, lo cual demuestra que el civismo en estas generaciones está bien arraigado. Junto a mi había un señor con su hijo, quien llevaba una bandeja para comprar en la tienda. El niño recordaba a su padre la urgencia del comprado, pero este respondió: “estamos en el colegio, que espere tu mamá”.

Escuchar esas palabras de pertenencia a dicha institución a pesar de estar fuera de ella ya por décadas, marcan la gran diferencia existente en algunos alumnos que defiende su inasistencia al colegio con el argumento de: “para qué ir si no sirve para nada”, y siendo conocedores plenos de los $ 1.000 que sus padres pagan por concepto de pensión mensual.