¿Coincidencias o qué?
¿Hubo realmente una revisión seria y responsable?
Como aficionado al fútbol concurrí al estadio, partido Barcelona y D. Aucas, seguro de que se cumpliría con el operativo de seguridad diseñado para el encuentro de la final de Copa Libertadores de América.
Después de una larga caminata, se hizo la revisión personal de los agentes policiales. Ocupé mi asiento a las 14:00. Se escuchó al “maestro de ceremonia”: “... se recuerda a los aficionados que no pueden ingresar a la cancha; no palabras racistas; no bengalas ni otros objetos que están prohibidos. En varias ocasiones ese repitió lo indicado.
Minutos después, el “maestro” anunció: “... recibamos al ídolo de la capital, Deportivo Aucas..” Y se escucharon las pifias. Se anunció el ingreso de Barcelona y todo el mundo de pie y aplausos. Tras el ingreso del equipo, la tarde se hizo medianoche. Las bengales y los “chispiadores” prohibidos aparecieron. Por la “Nor Oscura”, una lluvia de ceniza amarilla invadió el escenario y todos buscaban la mascarilla que ya no usan para cubrirse la nariz. Terminó el primer tiempo y otra vez se repitió la “prohibición”… ¿?
Se inicia el segundo tiempo y minutos después… Silencio en el Monumental… gol de “Papá” Aucas. Terminó el partido y el auténtico ganador, D. Aucas.
Pero la pregunta es: ¿Cómo es que habiéndose desplegado una estrategia con la Policía para cuidar nuestra seguridad antes, durante y después del partido, no se logró en esos filtros, detectar y comisar los tanques de gas que contenían la ceniza amarilla, las bengalas, los “chispiadores”? ¿Hubo realmente una revisión seria y responsable?
Ab. Óscar Solano Prendes