La Asamblea no está dictando leyes
en favor del pueblo

Tienen la culpa los ciudadanos al votar, no analiza, no medita qué candidatos están en las listas que les dan ciertos partidos, los cuales en forma muy hábil ponen a la cabeza a personas por las que el pueblo siente simpatía. En el resto colocan a verdaderos delincuentes y más que todo de baja preparación para ejercer el mandato de legislar y fiscalizar. En la actual Asamblea la tercera parte tiene problemas judiciales, problemas en la Contraloría y hasta personas que no pagan las pensiones a sus hijos. Ellos no podían ser candidatos, pero van en combo.

La Asamblea debe desaparecer y lo denuncia un exmiembro de la misma Asamblea, el Ing. César Rohon, quien renunció porque la Asamblea está actuando en favor de los mismos asambleístas. Por corolario, ponen en libertad a delincuentes, es decir que ellos se autodefienden y para el pueblo nada. La delincuencia a nivel nacional se ha tomado varios territorios y la Asamblea está sorda y muda, en lugar de dictar leyes con mayor rigor para quien viole las leyes. En Guayaquil cada día se mata por lo menos a cuatro ciudadanos y ni los asambleístas de esta provincia exponen nada. Ahora se esconden de la prensa, cuando son candidatos quieren que les publiquen hasta lo que comen.

Felicitamos a las personas que van a solicitar que los asambleístas de Pichincha se vayan a sus casas; lo mismos debe hacer cada provincia. El pueblo en forma unánime respaldará la salidas de estos politiqueros.

La muerte cruzada sería la mejor solución con otras reglas y que no sean candidatos los actuales asambleístas.

Gualberto Arias Bonilla