
La obra que incomoda de Abdón Segovia
La Casa de la Cultura presenta ‘Caníbales Comestibles’, última propuesta del artista guayaquileño. Una selección de 68 cuadros
El artista es un guayaquileño y tiene seis exposiciones individuales a lo largo de 23 años. Los conceptos sobre su última muestra en el salón ‘Manuel Rendón Seminario’, de la Casa de la Cultura Núcleo del Guayas (CCNG), evidencian que su proceso personal presenta “un trayecto sostenido de intenciones creativas”, como lo asegura el maestro Hernán Zúñiga Albán, en el texto de la curaduría de ‘Caníbales Comestibles’, la exposición que Abdón Segovia Campoverde presentó el jueves 17 de agosto de 2023.
Cada trazo en sus lienzos, nos invita a explorar una realidad alternativa, un lugar donde la mente y el corazón se entrelazan para crear un nuevo significado.
Son cerca de 68 obras presentadas en grandes y pequeños formatos. Algunas de estas, casi la mitad, dice el autor, que ya están en colecciones privadas, y fueron prestadas para esta muestra. Cuadros elaborados en acrílico, tinta y óleos; desarrollados sobre cartulina y tela.
- DURANTE 36 DÍAS. Hasta el 22 de septiembre se exhibe ‘Caníbales Comestibles’ en la sala ‘Manuel Rendón Seminario’, de la Casa de la Cultura Núcleo del Guayas (CCNG).
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Trabajos que abarcan un proceso creativo entre los años 2000 y 2017. Sin embargo, la mayor parte fueron elaborados a partir de la pandemia.
Acerca de esa etapa del encierro, Segovia asegura que le resultó muy productivo. La obligación de estar entre cuatro paredes y de buscar la forma de sacarle ventaja a lo mínimo con lo que contaba se vio obligado a realizar dibujos en pequeños formatos. “Era difícil conseguir materiales, entonces el pliego lo dividía en ocho. Esa práctica de cortar es como desmembrar. Algo que está pasando en la actualidad, con la violencia urbana que estamos viviendo y que evidencia el nivel de decadencia humana al que hemos llegado como sociedad”, asegura Segovia Campoverde.
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La muestra ‘Caníbales Comestible’ evidencia una visualización de la realidad que incomoda. Por lo menos eso es lo que dice el pintor quiteño Luigi Stornaiolo Pimentel. “Tiene variables que me incentivan. Me entusiasma verla y en algunos casos hasta me asusta, me complica, me incomoda. Cambia mi forma de ser y de pensar. A pesar de ello su obra me resulta poderosamente atractiva”, agrega Stornaiolo.
Es evidente que se trata de un pintor expresionista, de fecunda producción con una energía contestataria, para afirmar la diferencia de aquellos referentes importantes, que lo han inspirado...
El mismo artista reconoce que su temática busca generar una reacción, que “permita descubrirnos como seres humanos y que nos obligue a reflexionar acerca de los extremos de nuestra conducta humana. Me ha tocado luchar por mantener la propuesta. Hasta mi propia familia me pide que mejor pinte paisajes. No busco con mi obra agradar. Quiero incomodar para generar una reacción positiva”.
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ESTÉTICA CERCANA AL NEOEXPRESIONISMO
A su edad, 43 años, Abdón Segovia tiene un largo recorrido en el mundo de las artes. Así se lo reconoce el también pintor y catedrático en la Universidad de las Artes, Joaquín Serrano: “En mi memoria lo recuerdo como esos jóvenes que desde el diseño gráfico incurren en el arte, un poco inspirado por los maestros artistas que tuvo como docentes”. Aunque a nivel de muestras individuales no pase de seis, el número de las colectivas en las que ha participado -más de 100, según el mismo Segovia-, determinan su labor incansable en el mundo de las artes. Es más, se desempeña como gestor cultural y ha trabajado curadurías para muestras de algunos de sus colegas, como la reciente muestra de Federico Gonzenbach, también en la Casa de la Cultura. En lo artístico, Hernán Zúñiga define ‘Caníbales Comestibles’, como “una metáfora visual de la horrenda situación de convivencia social que estamos soportando estupefactos”. Una estética inédita que se sostiene en el neo-expresionismo que en algún momento Hernán Rodríguez Castello ubicó como “feísimo”, asegura Zúñiga.