Plantado a un costado de la sala ‘Manuel Rendón Seminario’, de la sede de la Casa de la Cultura Núcleo del Guayas, Federico Gonzenbach señala hacia uno de los once cuadros a plumilla que se exhiben en este espacio desde el pasado 11 de julio de 2023, cuya temática gira en torno a las edificaciones históricas ubicadas a los costados de la calle Numa Pompilio Llona, en el barrio Las Peñas. Precisa que el inicio de sus actividades artísticas se revela precisamente a partir de esa fase de su vida creativa.

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“Luego pasé por otras etapas. Cada una de estas se reflejan en esta muestra. Son 40 cuadros que recogen lo que he hecho y he sido como artista”, precisa.

Sus comienzos lo vinculan también con el lugar donde nació y con sus primeras influencias. “Vine al mundo en el barrio Las Peñas. Crecí jugando entre los talleres de artistas como Hugo Lara, Pepe Luque, Roura Oxandaberro, Jaime Villa, Carlos Catasse, Rendón Seminario”.

‘La línea en el tiempo, 1973-1980’, recoge los cuadros de esta fase, en la que, tal como asegura Abdón Segovia Campoverde, quien tuvo a cargo la curaduría, coordinación y museografía de la exposición, retrata las casas de sus vecinos del barrio Las Peñas. Aparecen las viviendas de las familias Santistevan, Avilés Alfaro, Antonio del Campo, Enrique Gil Gilbert, Lizarzaburo y Luzurraga, entre otros.

En estos primeros trabajos recurrió a la pluma, a la tinta china y lápiz al carboncillo. En síntesis, luces y sombras. Aún no era el tiempo del óleo.

De esa época recuerda que tenía 17 años cuando hizo su primera exposición en el Museo Municipal, en 1973. Uno de sus mayores logros de ese entonces resultó su viaje a París, en 1989, lo cual le permitió nutrirse del momento artístico que se vivía en Francia.

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Ya para entonces y a partir de 1982, había decidido romper su esquema de dibujante y atreverse al uso del óleo sobre tela. Se lanza a la conquista del color.

La muestra selecciona cinco cuadros de ese momento y están ubicados como ‘Testimonial, 1981 - 1989’. Una época en la que, según Abdón Segovia, mantenía los temas urbanos, como las casas de Las Peñas, aunque luego se abrió con paisajes marinos y de naturaleza.

En algún lado del Museo de artes Visuales Manuel Rendón Seminario están sus últimas producciones. Entonces ocurre un salto en el tiempo. En el ahora creativo de Gonzenbach aparecen los rasgos de otras improntas que él mismo reconoce. “Admiro mucho la locura de Van Gogh, los ismos de Picasso y la inspiración de Kandinsky. Esos tres artistas me han motivado mucho y encontrarán huellas de ellos en mis pinturas”.

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Esta parte se ubica espacialmente como ‘Esencia, 2010- 2023’. Sin embargo, en la muestra de estos días aparecen también obras esenciales de sus días dedicados a lo figurativo y a los temas religiosos. No por nada, la muestra que se exhibe en la Casa de la Cultura hasta el 4 de agosto de 2023 se llama ‘Gonzenbach Testimonial, 50 años de trayectoria’.

Abdón Segovia detalla que la vida artística de este guayaquileño se resume en cinco etapas: contraste, colores, creaciones y abstracto. También precisa este gestor cultural que en sus 50 años, Gonzenbach ha realizado 360 exposiciones, entre nacionales e internacionales. Ha pintado 20 mil cuadros. Cinco décadas en las que recibió múltiples reconocimientos y premios.