La plaza San Francisco, situada en el centro de Guayaquil, fue el lugar donde esperaban ansiosos decenas de adultos mayores de la ciudad, en compañía de sus familiares, para conmemorar su día y, a propósito de octubre, rendirle homenaje al Puerto Principal. Vestidos con trajes pintorescos, sosteniendo pancartas y panderetas, encendieron este 25 de octubre con su entusiasmo.

La iniciativa, liderada por el Centro Gerontológico Municipal Arsenio de la Torre Marcillo, en colaboración con la Dirección de Acción Social y Educación (DASE), tenía como objetivo fortalecer los lazos entre la sociedad y las personas de edad avanzada, quienes demostraron tener vitalidad y alegría para celebrar esta etapa de vida.

El recorrido inició desde la intersección de la avenida 9 de Octubre y Pedro Carbo y culminó en el hemiciclo de La Rotonda, en el Malecón 2000. Ahí se instaló una tarima con carpas para el acto oficial. Al compás de la Banda Municipal, el público danzó al ritmo de las clásicas canciones guayaquileñas, llenando de alegría el centro de urbe.

(Lo invitamos a leer: La galería que muestra el cálido rostro de los afectados por el deslave de Alausí)

Esta experiencia fue especialmente emocionante para los participantes, quienes disfrutaron del evento en un ambiente rebosante de fraternidad.

Selandia Álvarez, miembro del centro gerontológico, expresó su alegría por llegar a la tercera edad: “Lo importante es alcanzar la vejez con alegría, fe y mucho amor. Es una satisfacción haber compartido mi vida con mis hijos, mi esposo y mi familia”, contó.

Ocho mujeres conformaron el grupo de danza del gerontológico y lucieron elegantes vestidos que evocaban a las ‘bonitas criollas’, clásicas de los años 20 en Guayaquil.

Carmen Salazar, miembro del equipo de baile del centro, compartió su pasión. “Bailar es lo que me mantiene viva, me llena de alegría y felicidad. Llevo siete años dedicada a esto y espero que vengan muchos más”.

Así, la celebración se prolongó entre la calidez del público y la ciudad, donde diferentes peatones y ciudadanos disfrutaron del acto.

Luisa Lázaro, parte de la organización del evento, explicó que la iniciativa surgió para visibilizar a la población adulta mayor en la sociedad. Para ella, el objetivo radicó en “fomentar un envejecimiento activo y saludable, eliminando estereotipos y prejuicios hacia las personas mayores”.  

Para leer más información de este tipo, ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!