La COVID-19 vino a cambiar todo. En enero de 2020, los hinchas de Los Bajos y otros recintos que están cerca del complejo de Galácticos, en el sector de Montecristi, vivieron una verdadera fiesta con Barcelona tan cerca.

Ellos miraron cómo entrenaban sus jugadores favoritos, les cantaron y hasta se tomaron fotos. Un año después, todo eso está prohibido por culpa de la pandemia.

Pero el amor al club puede vencer todo obstáculo e incluso llevar a romper las reglas. El viernes 22 de enero de 2021, unos 12 hinchas de Barcelona se las arreglaron para ver a sus ídolos. Claro, como el acercamiento está prohibido, se metieron por un cruce, un camino lleno de lodo y piedras. Esquivando alambres de púas y otros pequeños peligros, además de superar unas pequeñas elevaciones, llegaron hasta el borde de la cancha.

Y allí recrearon un pedacito de la tribuna. José Cedeño, quien dijo que era líder de la barra amarilla de Bajo de la Palma, dio el paso para el cántico de “cómo no te voy a querer”.

Seguro que en la cancha no lo escucharon, pues los separaban unos 300 metros. Pero eso no importó, siguieron cantando.

Víctor Cabeza, otro hincha, animó con fervor, pero a la vez admitió sentir pena porque no podía tomarse una foto con Bruno Piñatares.

A la zona también llegaron hinchas como Byron Mercantil, Robert Merchán, Jair e Ítalo Araque. Ellos trataron de identificar a los nuevos jugadores amarillos, pero estaban lejos.

“El año pasado había policías, pero ahora no. Lo ‘turro’ es que no podemos acercarnos, pero son las reglas de ahora. Igual vamos a seguir viniendo a apoyar al ídolo”, se lamentó Robert Merchán.

Llegaron sudados. Habían pedaleado media hora por un camino alterno. Ellos tenían la esperanza de llevarse algunos recuerdos. Bryan Quijije, de 19 años y de profesión barbero, quería una fotografía con Damián Díaz; mientras que Jesús Lucas, también de 19 años, soñó con un selfi junto a Byron Castillo. Y aunque no lo consiguieron, se fueron felices por alentar desde lejos al Ídolo.

SERGIO LÓPEZ ESTÁ EMOCIONADO

En 2019, cuando quedó campeón con Delfín, Sergio López jugó de enganche. Ese pudo ser el motivo para no llegar al Barcelona 2020, ya que ese puesto es de Damián Díaz.

Pero ahora, tras un año en Aucas jugando un poco más retrasado, como volante mixto, las puertas se abrieron. López sostiene que puede jugar en toda la zona de volantes y llegar al área contraria con la posibilidad de hacer goles. En Aucas hizo nueve.

“De volante mixto me siento más cómodo. Hay que esperar a ver cómo le sirvo mejor a Fabián (Bustos)” dijo.

López aceptó que las primeras jornadas han sido buenas. Además, resaltó que existe una plantilla muy competitiva, con muchos amigos que dejó en su paso por Delfín.

Para él, Barcelona mostrará mucho fútbol este año. Incluso se animó a decir que pueden pelear la Libertadores.

Y SIGUE FICHANDO

El delantero Gonzalo Mastriani y el extremo Jonathan Perlaza jugarán en Barcelona durante la temporada 2021. Los dos fueron presentados por el club mediante sus cuentas de redes sociales. A pesar de todos los movimientos, el cuadro torero todavía no ha cerrado el libro de fichajes. El defensa central Luis Fernando León, quien por ahora pertenece al Atlético San Luis, está en negociaciones. Este fin de semana se concretarían.