Hay un color que bien podría describir a Alexandra, pues la entiende y representa: el rojo. Como el que ondea en la bandera de su amada Cuenca, y cuyo matiz va en consonancia con su energía y entrega a corazón abierto, así como también con su elegancia, esa que no tiene que ver con lo material, sino con las palabras adecuadas. Así se la percibe desde los primeros minutos de este diálogo.

Siendo las 14:00 en el sur de Francia y las 07:00 en Ecuador, ha hecho una pausa en su agenda. Le hace mucha ilusión saber que se considere el trabajo que ha estado haciendo desde Europa.

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Dice que su pasión por el arte y la cultura cimentó sus principios en la moda. Y así nació la marca Alexandra de V, con la cual refleja su admiración por las tradiciones y las raíces hispanoamericanas a través de productos artesanales de lujo.

Con más de tres años en el mercado, cuenta cómo en su vida todo se fue hilando hasta llegar a este desafío, que sacó su lado de mujer valiente, tal como lo son muchas cuencanas.

• Orgullo por las raíces

Nieta de Eulalia Vintimilla de Crespo, quien en vida se preocupó por el respeto a la tradición cuencana, Alexandra Crespo se inclinó, casi de manera inevitable, a la misma práctica de honrar y valorar las raíces.

“Desde niña pasaba con ella y escuchaba sus historias, siempre relacionadas a las tradiciones y la familia. Me hablaba sobre lo que hemos heredado como ciudad y de estar orgullosas del lugar de donde venimos”, recuerda.

En el camino estudió Administración de Empresas y luego cursó una maestría en Nueva York. Sin embargo, a la hora de trabajar siempre se inclinó a las ventas o a lo artístico. Por años vendió diamantes y también se dedicó a fotografiar para varias revistas del país.

Cuando se casó, Alexandra retomó la influencia cultural que sembró en ella su abuela, ya que se mudó a Madrid, España, junto con su esposo, el empresario guayaquileño Sergio Vinueza. “Se me hizo muy natural vivir allí. Tenemos la misma lengua, el folclor es muy similar, incluso las mismas dinámicas familiares”, refiere.

Motivada por su esposo, se animó a expresar toda esa riqueza cultural a través de productos de lujo. “He querido mostrar la artesanía y el excelente saber hacer español, junto con la gran historia de España, a la que está ligada Cuenca”, sostiene.

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Así nació la marca Alexandra de V (en referencia al apellido de su cónyuge), en 2020, el año de la pandemia. Empezó con pañuelos de seda, los cuales son elaborados en Francia por los mismos fabricantes que trabajan para Hermès, Dior y Louis Vuitton. Luego incorporó joyas y complementos que son trabajados en España. Y después, sombreros de paja toquilla en calidad prémium, hechos orgullosamente en Ecuador.

“Siempre me ha gustado el lujo”, dice. Pero para Alexandra, eso tiene que ver con lo que perdura y la calidad. Con esa lógica, sus productos han podido llegar a sitios como España, Japón, Estados Unidos, Francia e Italia.

Con viajes de ida y vuelta a Ecuador acompañada de su familia, Alexandra sigue imparable con su marca. Ahora, a modo de confesión, relata que desde Francia está trabajando en la elaboración de un perfume que reúne aromas florales que conectan con su querida ciudad.

“Me da emoción la hispanidad y mucho tiene que ver Cuenca. Como la mayoría, crecí con tradiciones y debemos estar orgullosos de eso que, a la final, nos ha hecho crecer como ciudad, como país. Soy feliz de sacar esa belleza, contar quiénes somos y que mis productos sirvan como un legado”, expresa orgullosa de este lugar que es tal como reza el famoso estribillo: “Eres España que canta en Cuenca del Ecuador”.

• La internacionalización

Con sus pañuelos ha podido llegar también a la reina Sofía. “Ella estuvo muy emocionada porque los estampados cuentan historias como las de Don Pelayo (monarca del reino de Asturias). Le pareció precioso que se hable de esa hispanidad y luego me envió una carta de agradecimiento”, menciona. Asimismo, han podido lucir sus diseños actrices como Jacky Bracamontes. El hecho de potenciarse a nivel online, con Instagram y su página web, ha ayudado a su rápida internacionalización.

• Historia y moda

Los reyes católicos, Don Pelayo, el Gran Capitán (Gonzalo Fernández de Córdoba), Francisco de Orellana, entre otros, son los personajes españoles que están estampados en sus pañuelos de seda. Alexandra tuvo que leer muchos libros para realizar los dibujos, con los cuales cuenta sobre Hispanoamérica y el legado que quedó en ciudades como Cuenca.

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