Un tema al que le han bajado el tono. Si el presidente Daniel Noboa quiere cumplir su promesa de llevar adelante una consulta popular en los 100 primeros días de gestión, el pliego de preguntas debería estar en manos de la Corte Constitucional (CC), a más tardar, la próxima semana.

Algo complicado, porque hasta donde se conoce, no se ha elaborado el cuestionario y los aspectos que se incluirían son un misterio. “Los temas serán presentados oportunamente, pero todavía no hay una respuesta oficial”, respondió extraoficialmente un funcionario consultado por EXPRESO.

Han pasado 12 días desde que se posesionó Noboa. Desarrollar una consulta toma no menos de 90. Una vez que el mandatario envía las preguntas a la CC inicia el control de constitucionalidad y los jueces tienen 20 días para emitir un dictamen. Si es favorable, el presidente debe firmar los decretos correspondientes y la pelota va a la cancha del Consejo Nacional Electoral (CNE) que tiene 15 días para hacer la convocatoria y 60 más para desarrollar el proceso.

Todos esos tiempos pueden ser ajustados, pero por experiencias pasadas las diferentes instancias los toman exactos y, en algunos casos, se alargan por contingencias que no están previstas y cronometradas en la normativa.

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Este Diario buscó la versión de la ministra de Gobierno, Mónica Palencia, a través de su equipo de comunicación, pero hasta el cierre de esta nota no hubo una respuesta. Sin embargo, en el programa Vera a su manera la funcionaria dijo, sin ahondar en el tema, que la consulta esperaría que sea en marzo. Los 100 días se cumplen en los primeros días de ese mes.

A criterio personal, Palencia considera que se debería incluir una pregunta sobre la designación de autoridades que ahora está en manos del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social.

También, de forma superficial, los voceros del Gobierno han señalado que la consulta giraría en torno a temas de seguridad como la participación de las Fuerzas Armadas, como complemento de la policía, cuando se perciban amenazas terroristas.

El analista político Giuseppe Cabrera considera que en estos días el Ejecutivo hablará muy poco del tema consulta popular por las fechas festivas, pero sobre todo por algo muy importante: querrá medir cómo se desarrolla en la Asamblea el tratamiento y debate de la ley urgente que envió.

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“Creo que el presidente es consciente de la fragilidad de ese acuerdo legislativo y si ve que hay demasiados cuestionamientos o cambios muy drásticos a su propuesta sabe que tiene esa herramienta que es la consulta popular que no la va a abandonar y en enero lo podrían retomar con fuerza”, señaló.

El politólogo César Luis Barthelotti, por su parte, considera que son temas que van por separado. Por un lado, la reforma trata de temas económicos y tributarias y la consulta seguramente será aprovechada por Noboa para incluir asuntos más sociales, de seguridad y reorganización del Estado.

Para él, la demora o haber relegado el tema, por ahora, se debe a que ya en el ejercicio del poder se encontró con que debe “apagar el fuego” en varios frentes empezando por la pugna con su vicepresidenta, Mónica Abad; otro es el de los apagones del que tendrá un respiro en estas fechas; y el pago de sueldos y el décimo tercer sueldo a los funcionarios públicos.

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