La voz del pueblo es la voz de Dios, reza la popular frase; pero varios son los venezolanos que buscan que sus voces sean escuchadas para escoger a su nuevo mandatario. Sin embargo, hasta la fecha, no han podido inscribirse para sufragar en los próximos comicios.

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Aunque desde el 18 de marzo pasado hasta el 16 de abril, de acuerdo con el cronograma aprobado por el directorio del Consejo Nacional Electoral de Venezuela, los venezolanos que quisieran votar deben inscribirse o actualizar sus datos en el Registro Electoral para participar en los comicios presidenciales del 28 de julio, no todos han podido hacerlo. Este procedimiento es tanto para quienes residen dentro o fuera del país.

Pero varios migrantes que viven en Ecuador, como Desirée Olaves, no lo han podido hacer en el Consulado venezolano en Guayaquil. Para la venezolana, “el CNE dictó un cronograma que ha sido violado por ellos mismos”, ya que el Consulado de Venezuela en Guayaquil les ha dicho que “no tienen ningún tipo de referencia sobre los requisitos que nosotros necesitamos para actualizar nuestros datos”. Ellos, desde la semana pasada han realizado plantoneras para que les permitan hacerlo.

“¡Soy migrante y exijo mi derecho a votar!”. “¡Soy migrante y mi voto también cuenta!”. “¡Exijo mi derecho a votar en Ecuador!”. “CNE no me quites mi derecho”. Estas son algunas de las frases que se leen en los carteles que varios venezolanos sostienen en los exteriores de la misión diplomática venezolana. Todos querían que les permitiesen actualizar sus datos.

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Sin embargo, lo que recibieron fue, primero, la visita de miembros de la Policía Nacional y, luego, de la Autoridad de Tránsito Municipal de Guayaquil, quienes habían sido llamados por la manifestación que estaba sobre la acera, frente al Consulado. Pero luego de que el personal de estas entidades de control habló con los venezolanos se retiraron.

Hace seis años, Jesús Pacheco salió de su país y se estableció en Ecuador junto a su familia, debido a la escasez de alimentos, de medicina y sumado a otros factores. Hoy quiere ejercer su derecho al voto, aunque no sea obligatorio. En su opinión, “ellos (el Gobierno venezolano) están jugando al retraso porque muchos venezolanos vamos a votar en contra de (Nicolás) Maduro”.

Para la venezolana Dayana Carvajal es “inconcebible que el Consejo Nacional Electoral de Venezuela nos venga a ver la cara a nosotros, diciéndonos que no han podido enviar las máquinas por las sanciones internacionales”. Pero no hay ninguna sanción de Ecuador hacia Venezuela, expresa indignada.

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Su mayor miedo, comenta, es que luego del feriado de Semana Santa se abra el Registro Electoral y tengan “el tiempo en contra”. Además, reclama que “los derechos se ejercen, no se mendigan”, ya que “son derechos inherentes al ser humano.

En la capital ecuatoriana, los venezolanos recién el miércoles 27 de marzo pudieron realizar el trámite en su consulado. Esto, después de que el venezolano Luis Magallanes decidiera empezar, el pasado martes 26 de marzo, desde las 14:30, una huelga de hambre fuera de las instalaciones del Consulado de Venezuela en Quito.

Con su pasaporte azul y copias de los documentos que requiere para hacer el cambio del domicilio electoral en la mano, Magallanes se sentó debajo del escudo del Consulado de su país, en los exteriores del edificio Comonsa, ubicado en la avenida Amazonas y Eloy Alfaro, en el norte de Quito.

Magallanes ante la impotencia de que no había la disposición política por parte del cónsul de Quito (Pedro Sassone) ni de Guayaquil (Jesús Rondón), porque no les permiten registrarse ni actualizar sus datos, prefirió hacer la huelga; para él era una lucha. Por otro lado, señala que en Quito y en Guayaquil son 37.000 venezolanos que deben realizar el proceso.

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EXPRESO solicitó una entrevista con la cónsul de Venezuela en Guayaquil, personalmente, en la misión diplomática, a través de mensajería instantánea y del correo electrónico; sin embargo, solo contestaron que “(...) sirva la presente para hacer ACUSE DE RECIBO de su solicitud (sic)” y no concedieron la solicitud.

Gerardo Noriega, migrante venezolano, exige que haya elecciones libres, democráticas, veraces, verificable, auditable y con la presencia de organismos internacionales que así lo avalen. “Creo que no es mucho pedir; es el sentimiento de todos”.

Debido a esta realidad, Pacheco espera que el presidente Daniel Noboa “nos apoye y se pronuncie” para que el Registro Electoral se abra. Además de que se solidarice con ellos, manifiesta Carvajal, y así puedan ejercer su derecho al voto.

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