Reunión. Dirigentes económicos en el encuentro del G20 en Shanghái.

El G20 apuesta por crecer sin estimulos

Los ministros de Finanzas del G20 se comprometieron ayer a impulsar un crecimiento económico que permita dejar atrás definitivamente la crisis financiera internacional con una base más allá de los estímulos monetarios.

La declaración publicada al cierre de su encuentro de dos días en Shanghái constató los crecientes riesgos que debilitan la recuperación económica mundial y la voluntad del grupo de las economías desarrolladas y emergentes por atajarlos, aunque eludió dar recetas.

Para superar ese sombrío panorama, el G20 enfatizó en el documento final de la reunión la necesidad de usar “todas las herramientas” monetarias, fiscales y estructurales “individual y colectivamente”.

Las intervenciones de los bancos centrales son insuficientes por sí solas para generar un “crecimiento sostenible”, pero tienen que apoyar una actividad económica que necesita de “políticas fiscales flexibles” para reactivarse, según se desprende del texto.

Incluso, con unos tipos de interés cercanos a cero en la mayoría de las economías desarrolladas -inclusive negativos en Japón- la economía global da signos de ralentización que han reavivado los temores de una posible recaída en otra recesión.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) han rebajado en las últimas semanas sus previsiones de crecimiento globales para este año a un 3,4 % y un 3 %, respectivamente.

“No existe margen adicional para inyectar liquidez”, explicó el ministro español de Economía, Luis de Guindos, quien añadió en declaraciones a los periodistas que algunos países pueden intervenir en el frente fiscal. EFE