Son 97 días los que no ha llovido en la capital azuaya. Esto da paso a una ‘grave sequía histórica’ que afecta a los caudales de los ríos que dotan del líquido vital a la ciudad.

Para Rigoberto Guerrero, administrador de investigación y monitoreo de Etapa EP, factores como la falta de lluvia, las temperaturas extremas y caudales bajos han generado una grave “sequía hidrológica”.

Pese a que se han registrado eventos de lluvia en estos días, no han sido suficientes para recuperar los caudales, como el del río Tomebamba, que dota a la planta de potabilización de El Cebollar, misma que abastece a más de 200.000 ciudadanos de agua. “Estamos por debajo del umbral de estiaje de 1,2 metros cúbicos por segundo”, detalló.

Las lluvias esporádicas registradas han hecho que los caudales suban súbitamente hasta 10 u 11 metros cúbicos, sin embargo, los días de extremas temperaturas hacen que no se sostengan. Las fechas más críticas de los caudales, que han marcado menos de 0,3 metros cúbicos por segundo, son el 10 de octubre, 3 y 21 de noviembre.

Según la empresa municipal, han logrado garantizar el caudal básico de este afluente por el sistema de protección que realizan en las vertientes naturales que se ubican en el Parque Nacional Cajas y en el bosque protector Mazán. “Esto ha evitado que lleguemos a los cortes del servicio de agua potable, pero no sabemos cuál es la capacidad de resiliencia de estos sistemas porque llegará el punto del colapso del ecosistema”.

Otro factor que afecta Cuenca son las temperaturas extremas. Pese a que se han registrado lluvias en las últimas semanas de noviembre, no son suficientes por el factor climático.

Cristina Argoti, analista de pronóstico meteorológico del Inamhi, señaló que todo el callejón interandino presenta esta particularidad de altas temperaturas. En el caso de Cuenca, apuntó que las mayores temperaturas registradas entre octubre, noviembre y diciembre fueron: el 7 de octubre con 28 grados centígrados, el 3 de noviembre con 27 y el 4 de diciembre con 24.

El promedio de la temperatura en la urbe morlaca se ha mantenido, en los primeros días de diciembre, en un promedio de entre 24 y 24,8 grados centígrados. Las temperaturas elevadas son desde las primeras horas de la mañana y alcanza su pico más alto entre las 13:00 y 16:00.

Argoti puntualizó que la condición climática “no necesariamente está relacionada con el fenómeno de El Niño”, pero que existe registro de los estragos de su paso por el país. “Provoca déficit de lluvias que produce el estiaje, en este caso extremo”, no solamente en ríos de Cuenca, sino en otros afluentes de la cordillera interandina”.

En este contexto, Etapa mantiene registro de años anteriores con respecto a las consecuencias del fenómeno de El Niño. En los años de 1997 y 2015 también se presentaron oscilaciones que provocaron sequía como antesala a la llegada del hecho climático. “No pensamos que se extendería por tantos días la sequía. Dijimos en primera instancia que sería hasta octubre, pero ya superó a las sequías anteriores”.

Para contrarrestar futuras sequías, Etapa EP cuenta con un estudio realizado por la Universidad de Cuenca, en 2018, para construir un embalse en la laguna de Dos Chorreras, en El Cajas. En su momento se presentaron algunos inconvenientes para su ejecución, como la compra de terrenos, permisos ambientales y otros. “Hace cinco años capaz no había la necesidad emergente, ahora contar con reservorios artificiales es una necesidad urgente”.

Un ejemplo de esto es la cuenca del Machángara que mantiene los caudales, pese a la falta de lluvias, gracias a la presencia de los embalses de Chanlud y El Labrado en un promedio de 3,6 metros cúbicos. Esto significa captar alrededor de 800 litros por segundo y hace que Etapa tendrá un superávit de agua.

El estudio será actualizado a partir de este mes y a esto se retomará el monitoreo de la laguna para determinar la calidad del agua, el impacto ambiental y el beneficio a futuro.

Los técnicos han estimado que con el embalse podrán captar entre 700 y 800 metros cúbicos de agua por segundo. Esto también permitirá mantener caudales base que no puedan ser evaporados por las altas temperaturas.

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Para saber...

• El día más caluroso de Cuenca fue el 7 de octubre de 2023, cuando se registró 28 grados centígrados, según el Inamhi.

• Las lluvias deben extenderse por diez días continuos para terminar con la sequía.

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