Ecuador tiene un sistema de Inteligencia con manos atadas
Para desarticular una banda no se permiten agentes encubiertos o compra de información como en otros países. Las emergencias por explosivos crecieron
Todo sistema de Inteligencia, de cualquier país del mundo, persigue los mismos objetivos: interpretar el futuro, prevenir las amenazas y actuar.
La capital de los ecuatorianos fue sorprendida. Las alertas fallaron y la violencia, desde hace varios meses, sigue al alza.
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Este viernes 1 de septiembre de 2023 quedaron con prisión preventiva 10 personas, procesadas por terrorismo. La Fiscalía los vincula como los autores materiales de los atentados con carro bomba ocurridos entre la noche del miércoles y madrugada del jueves.
Tras las audiencias, la Unidad de Flagrancia de La Mariscal, en Quito, fue el objetivo de la organización criminal Los Lobos, cuyos integrantes van desde pandilleros hasta narcotraficantes y que trabajan apoyados por el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), que se disputa el control de las rutas de cocaína en Ecuador, indica a EXPRESO un agente de Inteligencia.
Aunque el edificio de Flagrancia tiene un control policial en el ingreso, Los Lobos se dieron modos para ingresar y dejar en el casillero de citaciones de los fiscales un panfleto. “Si siguen capturando a nuestra gente y no nos dejan en paz te vamos a matar a ti y a tu jefecita. Te estamos avisando, dejen de perseguirnos”.
Para el general Pablo Rodríguez, en servicio pasivo, las fallas en el sistema de Inteligencia se deben a dos factores. Primero, por la falta de una Ley de Inteligencia y por la falta de herramientas que tienen otros países.
En Ecuador no es legal la compra de información, el uso de agentes encubiertos o las compras controladas. “En otros países, para rastrear una red de drogas o armas, se hacen compras y al momento de la entrega se desarticulan las redes”.
El oficial retirado indica que actualmente las herramientas que tiene el Estado se limitan a vigilancias, seguimientos, manejo de fuentes humanas y fuentes abiertas como redes sociales y la interceptación telefónica y de datos. “Sin embargo, todo esto solo se hace con la autorización de un juez. No hay autonomía y, muchas veces, hay fuga de información”. Pone un ejemplo: La reciente incautación de una carga de 9,5 toneladas de cocaína en el puerto de Algeciras, en España, procedente de Ecuador, se realizó gracias a la compra de información.
El no poder adelantarse a los hechos ha dejado a la Policía en un rol reactivo. Este año, los escuadrones Antiexplosivos han debido afrontar un incremento de las alertas por presencia de artefactos explosivos.
En 2022, entre denuncias falsas y verdaderas se atendieron 282 casos de objetos detonantes. En estos nueve meses de 2023 ya suman 322 casos (ver info).
El miércoles, la Policía realizó la detonación controlada de tres granadas en Quito. El hecho también está asociado a integrantes de la banda Los Lobos. En la cárcel de Cuenca, donde Los Lobos son la banda que controla, secuestraron a medio centenar de agentes penitenciarios. Y dos meses antes, esta misma organización criminal lanzó una granada y protagonizó una balacera en Flagrancia, con la intención de matar a cinco integrantes de una banda rival.
“Podemos enumerar un sinfín de hechos. Todos son alertas o síntomas. La Inteligencia debería conectar cada uno, hacer un análisis y darnos a los policías que estamos detrás de las bandas apreciaciones de seguridad sobre esta organización para los siguientes meses”, dice un agente de la Policía.
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Diego Pérez Enríquez, investigador y decano de la escuela de seguridad y defensa del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), dice que el sistema de Inteligencia de Ecuador ha sido armado y desarmado tres veces en 15 años. “Es imposible que sea un sistema fuerte”. Otro factor en contra es su modelo de abordaje. Señala que la información pasa por diferentes etapas, desde el momento de recoger las fuentes, hasta llegar al nivel de Presidencia. “Muchas veces no tenemos las prioridades de seguridad claras y la información que se recoge cae en un estado de complacencia de que nada va a pasar. “Eso no ha pasado en Quito’, entonces sigamos igual”.
El experto llama a pensar en los peores escenarios y prepararse como Estado para enfrentarlos. Eso incluye el rol de los jueces, que liberan a personas con perfiles peligrosos.
El sistema de Inteligencia ha sido armado y desarmado tres veces en 15 años.
- Legislación. En 2018, el Ministerio de Defensa entregó en la Asamblea un proyecto de Ley de Inteligencia. Hasta el momento no se ha aprobado.
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