
En el congreso portuario se debaten las perspectivas y las nuevas infraestructuras
El Congreso Internacional, ‘Últimas Tendencias en el Sistema Portuario Regional’, de mañana, analizará la situación del sector en momentos en que Guayaquil discute la necesidad, o no, de nuevas infraestructuras portuarias.
La firma del memorando de entendimiento entre el Gobierno y la firma dubaití DP World para la inversión de $ 1.200 millones en el puerto de Aguas Profundas de Posorja, la concesión de Puerto Bolívar a la turca Yilport que planea invertir otros 750 millones, y el posible manejo privado de Manta a manos de una firma chilena, generan grandes preguntas: ¿Son necesarias esas grandes inversiones? ¿Serán rentables? ¿Es posible que se genere una burbuja portuaria como en España? ¿Será similar a la historia de algunos aeropuertos del país, construidos y no usados?
Julián Palacio, presidente de la Asociación Latinoamericana de Puertos y Terminales (Latinports) y José Modesto Apolo, presidente del Instituto Iberoamericano de Derecho Marítimo, intentarán despejar esas dudas.
De hecho, el primero de ellos, ha dicho que “los puertos no son imanes que atraigan carga de comercio exterior por el solo hecho de contar con instalaciones eficientes y aguas profundas, hay que tener mucho cuidado al planificar la expansión del sector, pues se corre el riesgo de repartir la misma carga entre más terminales, volviendo poco atractivo el negocio con negativas consecuencias para la competitividad. Se debe evitar por tanto la aparición de “elefantes blancos” con su correspondiente mala asignación de recursos en países que tanto los necesitan”.
Aunque Roberto Dunn, director ejecutivo del consorcio Nobis, accionista de DP World Ecuador, ha dicho a EXPRESO, que “Posorja va a ser un puerto que va a sumar al tráfico nacional de carga de Ecuador. No está diseñado para servir a los actuales barcos que entran al puerto Simón Bolívar (sur)”.
“El puerto está diseñado para esos barcos que usted los ve pasar para Callao (Perú), para Buenaventura (Colombia), Chile y que actualmente no tocan el país”, resaltó a este Diario.
José Modesto Apolo, en una charla anterior, puso como ejemplo lo que pasa en el negocio aeronáutico mundial: “No porque tengamos los aeropuertos más grandes van a venir aviones” como el Airbus A380 capacidad para transportar a 615 personas.
Quiere decir con su metáfora que no porque hayan grandes puertos van a llegar los megabuques al país. GLC
‘ICTSI abandona muelle por falta de carga’
No solo España ha sufrido lo que se llama “burbuja portuaria”, es decir, inversiones en infraestructura que está desocupada. Argentina tiene un caso, según el diario La Nación.
La terminal de contenedores Tecplata, una inversión privada de $ 480 millones en el puerto de La Plata, cerró sin haber operado con ningún buque internacional desde su inauguración, en julio del año pasado, por parte de su impulsor, el entonces gobernador Daniel Scioli. La terminal cesó a 100 de sus 130 trabajadores.
“Tecplata, perteneciente al grupo filipino Ictsi, arrancó las obras en 2008 gracias a una adjudicación directa -sin licitación pública- por 30 años, renovables por otros 30. Pero la crisis económica global y las restricciones del comercio exterior argentino de la última década impidieron que la terminal cerrara contratos comerciales con las líneas marítimas”, indica el diario.
La compañía apostaba a que una nueva oferta portuaria, más económica que las existentes en los puertos de Buenos Aires y Dock Sud, tentara tanto a las navieras como a los importadores y exportadores. Pero la demanda -ubicada mayormente al norte de la provincia de Buenos Aires- no estuvo dispuesta a asumir el mayor costo logístico terrestre de retirar y entregar contenedores en La Plata. La carga no acompañó el proyecto y las navieras tomaron nota.
Tecplata informó que se vio “obligada a reducir su plantel de personal hasta tanto formalice un acuerdo con alguna de las líneas armadoras que operan en la región”.