Cada vez más capitalinos optan por denunciar el maltrato de las mascotas y la negligencia en su cuidado.

A diario en la Unidad de Bienestar Animal (UBA) ingresan las quejas: perros sin correa en los parques y zonas de niños; perros agresivos, animales abandonados y maltratados. Las denuncias se acumulan en espera de una pronta solución.

Sin embargo, la Unidad de Bienestar Animal atiende según el grado de prioridad. Un caso puede ser resuelto en horas como en semanas.

Cristina Cely, por ejemplo, denunció el jueves pasado, que en la calle Iberia y Jerez, en La Vicentina, hay cinco perros que están llenos de motas, sucios y mal nutridos. “Ya por algún tiempo se evidencia la negligencia, abandono y maltrato perpetrado sobre estos perros que tienen tutor. Se dice que el señor tutor es fiscal y que las personas del barrio tendrán miedo de realizar las respectivas denuncias”.

La joven pidió que la actuación sea “de oficio” y lo más rápido “no esperar a papeleos que alarguen el sufrimiento y abandono de animales, a la espera de que alguien denuncie”.

La UBA recibe decenas de denuncias por redes sociales. Pero cada vez la respuesta de la institución es que la gente llene un formulario.

En este se pide el número de cédula, nombres, dirección del lugar de los hechos, nombre y dirección del presunto maltratador y evidencias fotográficas.

Sin embargo, los funcionarios de UBA sí hacen operativos de control, por ejemplo, a veterinarias, tiendas de mascotas y criaderos de toros.