Lecciones de amistad

Mi casa no es un palacio, pero el lugar para la estadía temporal de Copito es cómodo, seguro y sobre todo con buena voluntad

El temblor del 18 de marzo de 2023, ocurrido en Ecuador, mostró una vez más cuán frágil somos ante la furia de la madre naturaleza y también reveló falencias en edificaciones, para que las futuras administraciones municipales apliquen controles más rigurosos y eviten que se cometan los mismos errores que causan grandes pérdidas económicas para los damnificados.

En medio del caos, siempre hay luz. Ese día regresaba a pie a mi casa y sentí el remezón, al llegar a la esquina de mi cuadra vi a la mayoría de mis vecinos en la calle y también a Copito, un can perteneciente a uno de mis vecinos, quien duerme en mi hogar cuando sus dueños viajan o asisten a fiestas.

Todos miraban cómo la mascota buscaba de forma desesperada entre las personas, sus dueños lo llamaban pero él los ignoraba, hasta que me vio en la esquina y corrió hacia mí inmediatamente. Por su mirada expresiva, comprendí que su acercamiento desesperado era su forma de preguntarme: “Te busque y no te encontraba, ¿estás bien?”.

Mi casa no es un palacio, pero el lugar para la estadía temporal de Copito es cómodo, seguro y sobre todo con buena voluntad.

La Biblia en Lucas 6:31 nos dice: “Traten a los demás como ustedes quieran ser tratados”. El actuar de Copito me recordó cuán sabios son los animales. Muchos humanos destruyen los puentes por donde caminan una vez obtenido su objetivo, porque creen que no los usarán nuevamente. Qué grave error.

Marysol del Castillo