Avivar la fe trae alivio al andar

Venga a nosotros esa bondad divina, hágase virtud para sentirnos libres, para poder hallarnos y expresarnos

Nada permanece, todo se transforma; y así, cada pulso requiere purificarse, conciliarse con la espiritual creación, corregirse y enmendarse cada aurora, poniendo la fe en la cruz amparadora.

Fortalecer la creencia es vivificarse, explorar con brazos fuertes la cima, reconocer que Jesús nos acompaña, que está vivo recorriendo el mundo, con el poder del bien y para el bien.

Venga a nosotros esa bondad divina, hágase virtud para sentirnos libres, para poder hallarnos y expresarnos, junto a Dios y con Dios fusionados; pues, en su quietud, se alivia el andar.

Víctor Corcoba