Carlos III y su esposa Camilla Parker Bowles se convirtieron en los soberanos de Gran Bretaña el 6 de mayo de este año. Ellos volverán a ser coronados el 5 de julio en la catedral de San Giles en Edimburgo. Tras esa ceremonia se hará una procesión por la Royal Mile, una famosa calle de la ciudad. Los honores que serán dados a los reyes son unas joyas de la corona escocesa, que normalmente se exponen en el castillo de Edimburgo para que quienes lo visiten puedan verlas.

Estas están fabricadas con oro y plata y cuentan con cristales y piedras preciosas que las hacen una de las reliquias más antiguas de Gran Bretaña.

La Piedra del Destino, como se llama a estas joyas, se utilizó durante la ceremonia de coronación de los monarcas escoceses desde la Edad Media. Luego Eduardo I de Inglaterra se la robó y la envió a la abadía de Westminster para utilizarla en la coronación de los reyes de Inglaterra. Esta piedra estará presente en la Catedral cuando se den los honores a Carlos III y Camilla.

Una procesión de alrededor de cien personas será la encargada de llevar los honores. Estos representan los momentos de la vida y cultura escocesa. La procesión estará encabezada por el Real Regimiento del país. También participarán miembros del Parlamento y algunos representantes de determinadas organizaciones benéficas.

Tendrá una temática clara: cultura escocesa. El cortejo real comenzará en el palacio de Holyroodhouse y se movilizarán hasta la catedral de San Giles con una escolta militar.

Después de que la misa termine en el castillo de Edimburgo se lanzará una salva de 21 disparos de un cañón.

Los padres de la princesa de Gales en quiebra

Un negocio dedicado a vender suministros para fiestas que 36 años después de surgir está en bancarrota para contrariedad de sus dos fundadores, Carole y Michael Middleton, padres de Kate Middleton. Ha sido el empresario James Sinclair que la ha adquirido. Según se ha revelado tiene deudas superiores a 3,23 millones de dólares, de hecho, deben impuestos por un total de más de 753.690 dólares.

Estos datos han visto la luz en un informe de administradores con el que se intenta recuperar el dinero para los acreedores. En él se da a conocer que deben más de 215.340 dólares a un banco por un préstamo pedido durante el coronavirus, más de 538.350 a otros acreedores y 1,5 millones en otros préstamos.

Eso sí, pocos creen que este dinero lo vayan a recuperar en algún momento, lo que ha provocado que todas las miradas se sitúen en los padres de la princesa de Gales. “Estábamos asombrados por la cantidad de dinero que se les debía a otros”, han explicado en un diario británico.

Hay muchas personas que se sienten dolidas por esta situación para ellos debido a la relación con la realeza. “Lo que más me dolió fue que confiaba en ella como la suegra del futuro rey y ella simplemente me traicionó”, han asegurado.

Mientras los padres de Kate culpan de sus números a la crisis y a la fuerte caída de ventas lo cierto es que son muchas las críticas contra ellos.

Kate Middleton no puede firmar autógrafos

Durante la exhibición anual de jardines Chelsea Flower Show una de las niñas que asistieron y estuvieron compartiendo con Kate Middleton le pidió que le firmara un autógrafo en la libreta. Petición que tuvo que declinar la princesa de Gales y le contestó así, “Mi nombre es Catherine. No tengo permiso para escribir mi firma, es una de las reglas”, dijo, pero “sí puedo dibujar”.

Ella dibujó una flor para una de las pequeñas que le había ofrecido su cuaderno y también pintó dos dibujos más para otros dos niños, un árbol para uno y un estanque rodeado de plantas para el otro.

Los miembros de la Familia Real británica evitan firmar autógrafos por el riesgo de que se puedan crear falsificaciones a partir de su firma. Aunque para aquellos que desean hacerse una fotografía con ellos no tienen inconvenientes en posar, darles la mano y charlar un rato.

En este mismo evento, cuando uno de los infantes le preguntó cuál sería el primer proyecto que llevaría a cabo cuando fuera reina, ella contestó sin dudar, “ayudar a los niños”. Compartió con los más pequeños su experiencia como miembro de la Casa Real, “tienes que trabajar duro, pero lo mejor es conocer a niños como tú”.