Todo quedó en promesas. Para el 1 de diciembre de 2022 estaba prevista la inauguración de la regeneración urbana de las calles Guayaquil y 9 de Octubre, en La Libertad, en Santa Elena; pero pasa el tiempo y la obra sigue estando a medias.

Los trabajos consistían en un mejoramiento integral con la ampliación de las veredas, colocación de nueva carpeta asfáltica, el soterramiento de los cables de instalaciones eléctricas, telefonía e internet... Pero apenas una parte de estos trabajos se ha ejecutado.

Las veredas, por ejemplo, quedaron a medias, pero del soterramiento, nada. Los ‘tallarines’ que cuelgan de los postes son parte del escenario. De allí que la obra no ha sido entregada ni inaugurada, lo que ha sido aprovechado por el comerciante informal, que se ha instalado en las aceras que ahora están más anchas.

“La falta de seriedad por parte de la Alcaldía, esa manera de vernos la cara, ha hecho que nadie respete lo poco que se ha hecho. El peatón, otra vez, camina sobre el asfalto y comparte el espacio con los camiones y buses; mientras que las veredas se han convertido en una especie de bahía, que ahora incluso permanece sucia. ¿Y quién dice algo? Nadie. Ni un solo ser: ni el alcalde Francisco Tamariz ni los concejales. Ellos andan en otro asunto”, se quejó la ciudadana Valeria Infante.

Los ciudadanos denuncian que los asientos de madera que se colocaron en las esquinas de ambas vías han empezado ya a dañarse; que las plantas ornamentales que intentaron dar sombra ahora están marchitas; y que las alcantarillas están ya sin tapas. Se las han robado.

La obra la inició la administración del exalcalde Víctor Valdivieso y hasta su salida, en mayo de 2020, no pudo inaugurarla. El alcalde actual, en el arranque de su período, dispuso una revisión a los contratos de obras de su antecesor y uno de esos convenios fue el de la regeneración urbana en este espacio.

“Que debemos esperar, pero no sabemos hasta cuándo. En principio, la ampliación de la vereda quedó bonita, falta que los cables de todas las instalaciones vayan por debajo de la tierra, esto último le faltó al anterior alcalde”, dijo el ciudadano Víctor Pérez, quien lamenta que la obra se está deteriorando sin ser ni siquiera inaugurada.

“Ahora regresó el desorden. Es inaudito que se haya invertido tanto dinero para nada. Parece que el beneficio solo ha sido para los informales. Nosotros hemos pagado por esta regeneración, pero se nos burlaron”, reclamó el ciudadano Luis Solís.

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Para el arquitecto Nilo García, este es el resultado de una mala planificación. “Todo se hizo a la ligera, la idea era captar votos para una reelección que no ocurrió. Siempre tuve mis dudas referentes a la obra civil, lamentablemente, las autoridades no escuchan las sugerencias de los pobladores”, comentó.

El ingeniero civil Hugo Rodríguez Mirabá, presidente de la Cámara de la Construcción de la Península, coincidió con García en el hecho de que falló la planificación y le faltó tiempo al anterior administrador municipal para concluirla.

“Es un problema con las obras que quedan inconclusas cuando se cambia de gobernantes, esto porque las nuevas autoridades municipales le ponen un montón de trabas con la supuesta fiscalización. Ojalá que la regeneración urbana que le viene muy bien a La Libertad se la termine. Han ocurrido casos de obra que la dejan abandonadas porque no fueron oferta del alcalde actual”, señaló el dirigente.

Consultado sobre este tema, el alcalde Francisco Tamariz aseguró a EXPRESO que la obra no ha sido abandonada, como aseveran los ciudadanos; e indicó que semanas atrás se efectuó la construcción de bordillos, se culminó con la colocación de adoquines en las aceras que faltaban y se efectuaron las instalaciones de aguas servidas y agua potable.

“Actualmente, se trabaja en el soterramiento de instalaciones eléctricas en la calle Guayaquil. El reinicio de los trabajos tiene un costo de inversión de $ 2’029.528,19. Luego de que se culminen las instalaciones eléctricas de media y baja tensión, se instalarán las líneas de telecomunicaciones. Después se procederá al retiro de los postes de hormigón que existen hoy”, detalló.

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Según Tamariz, los nuevos postes para el alumbrado público serán de fibra y la iluminación será con luces ledes. “Estamos esperando la aprobación por parte de CNEL para empezar con el soterramiento. Queremos cumplir con todos los parámetros establecidos”, informó.

Sobre el comercio informal, la Alcaldía planifica nuevos espacios para habilitar ferias que den apertura, de forma permanente, a los vendedores ambulantes.

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