El prodigio francés Victor Wembanyama, seleccionado con el número uno en el draft por los San Antonio Spurs, dio las gracias ayer al argentino Manu Ginóbili, Tim Duncan y David Robinson, leyendas de la franquicia texana, por invitarlo a cenar en su llegada a la ciudad y por compartir con él sus experiencias.

“Aprendí más sobre la NBA en dos horas con ellos que en el resto de mi vida. Es bueno ver que esta gente tan importante para San Antonio es tan amable y generosa, querían genuinamente compartir sus experiencias”, contó Wembanyama en su presentación oficial como nuevo jugador de los Spurs.

“Duncan me dijo que él solo tuvo que mirar a David Robinson y seguir su camino, sabía que estaba en buenas manos”, prosiguió, además de manifestar su ilusión por trabajar bajo las órdenes del técnico Gregg Popovich.

Wembanyama, de 19 años, es considerado como un talento generacional y en la NBA no se recibía a un jugador con este entusiasmo desde que los Cleveland Cavaliers seleccionaran a LeBron James en 2003.

De 2,23 metros de estatura, Wembanyama puede anotar de tres y en la media distancia, maneja el balón con habilidad y rapidez para un jugador de sus dimensiones, se desplaza con mucha agilidad y soltura.