Sin reproches. Richard Carapaz dio el máximo en la penúltima etapa, pero no le alcanzó. Perdió la ‘maglia’ rosa y por la diferencia de tiempo con Jai Hindley (1’25”) se olvidó, prácticamente, de la posibilidad de ganar el segundo Giro de su carrera deportiva.

El premio consuelo, que no es poco, es que hoy podría subir por cuarta vez a un podio en Grandes Vueltas. Ya fue campeón del Giro (2019), segundo en la vuelta a España (2020) y tercero en el Tour de Francia (2021). Eso, sin contar que ya es el latinoamericano que más veces ha portado la ‘maglia’ rosa y que ostenta una medalla de oro olímpica. Esto lo consolida como el mejor ciclista de la historia del Ecuador.

Carapaz llegó con tres segundos de ventaja a la etapa de ayer, entre Belluno y la Marmolada. El objetivo principal era ampliar esos números, a pesar de que en un eventual mano a mano en la contrarreloj (la etapa de hoy) Carapaz maneja mejores tiempos que Hindley.

Además, parecía que la carrera estaba controlada en la mayor parte del recorrido. En el grupo principal, el deportista tricolor estuvo respaldado por sus compañeros de Ineos. Iba a rueda de ellos y se veía fuerte.

Incluso, parecía que estaba en condiciones de escaparse. Sin embargo, el equipo cometió un error táctico en los últimos cinco kilómetros.

Después de imponer un gran ritmo, fundir a la mayoría de rivales y dar el mensaje de que todo quedaba para el mano a mano entre Hindley y Carapaz, los gregarios de Ineos se abrieron. Habían dado una muestra de mucha fuerza.

Y cuando se suponía que empezarían los ataques entre los líderes de la general, apareció una figura inesperada: Lennard Kämna, compañero de equipo de Hindley.

Él se había escapado en la fuga y salió del radar de cálculos para todos, menos para el Bora. Se olvidó de la pelea adelante y se quedó para empujar a Hindley. Su ingreso en la fórmula cambió todo, no solo porque impulsó el ataque de su compañero, sino que también sirvió como marca para Carapaz, para que su respuesta no sea tan efectiva.

Y así, el australiano aceleró de una forma que fue imposible de igualar y marcó una diferencia que prácticamente lo deja como el campeón.

En los números, Carapaz debería descontar cinco segundos por cada kilómetro en la contrarreloj individual para recuperar el primer lugar. Es algo muy complicado, pero no es imposible. Después de todo, en 2020 Hindley ya llegó a la última etapa con la ‘maglia rosa’ y no tuvo las piernas para conservarla.