El presidente de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC), Gabriele Gravina, adelantó que tiene la intención de completar el actual torneo de la Serie A, aunque destacó que no se jugará ningún partido con público ni en las ciudades ubicadas al norte del país, donde está el principal foco de contagio de coronavirus.

"Si retomamos en junio, se completará el campeonato, y si lo hacemos más adelante también la idea es jugar los 12 partidos que restan para terminar la actual temporada", explicó Gravina.

El princpal de la FIGC destacó que "será a puertas cerradas y no habrá partidos en los estadios del norte", los ubicados en las ciudades de: Milán, Bérgamo, Brescia o Cremona, sino en "todas las ciudades del centro y sur" de Italia.

La Serie A suspendida en marzo pasado tiene como líder a Juventus con 63 puntos, seguido por la Lazio con 62 y más atrás el Inter con 54, en las principales posiciones.

En cuanto al campeonato para la temporada 2020-2021, Gravina reveló que podría comenzar en enero de 2021 y extenderse durante cinco meses para terminar antes de la Eurocopa. "Podríamos jugar en dos grupos con playoffs y únicamente para la próxima temporada".

El coronavirus ha causado más de 20.000 muertos en Italia y ha llevado al límite el sistema sanitario del país, sacudiendo particularmente el norte, con Lombardía, Piamonte y Véneto como regiones más afectadas. Y si las medidas de confinamiento y contención del virus están dando las primeras, lentas, señales de mejora, en este momento sigue siendo muy complicado volver a organizar partidos de fútbol en condiciones de seguridad, incluso a puerta cerrada.

ALTERNATIVA

Al ser consultado respecto a si existía una fecha tentativa para que el balón vuelva a rodar, el dirigente se mostró optimista de hacerlo a finales de mayo o a principios de junio. "Comparto el deseo del ministro de Deporte, (Vincenzo) Spadafora, de reanudar los entrenamientos el 4 de mayo, con todas las atenciones y garantías necesarias".

"Hemos preparado un protocolo sanitario. Es rígido, atento, pero flexible y fácil de aplicar", acotó Gravina.

El dirigente reconoció que Italia vive un momento complicado, pero consideró que anular definitivamente la Serie A sería una decisión equivocada.

"Quienes piden anular la Serie A creo que no aman al fútbol ni a los italianos, porque no quieren dar esperanzas de salir adelante", concluyó.