Todos sabemos que tenemos un corazón, un hígado, dos riñones y otros órganos. Sin embargo, un grupo de científicos aseguran haber descubierto uno nuevo. Sí, una evidencia más de la complejidad del cuerpo humano y de que la ciencia siempre, siempre, puede sorprendernos e interpelar verdades.

Fueron científicos del Instituto del Cáncer de los Países Bajos los que hallaron un posible órgano nuevo, específicamente un par de glándulas salivales. Este se encuentra escondido en la unión de la cavidad nasal y la garganta.

De acuerdo a un informe del The New York Times, si se confirma este descubrimiento, será el primer conjunto de glándulas salivales reveladas en 300 años.

El equipo de científicos europeos dio a conocer sus hallazgos el mes pasado en la revista Radiotherapy and Oncology.

El reciente descubrimiento se dio de casualidad, mientras los científicos estudiaban exploraciones de alta resolución de pacientes con cáncer de próstata.

Cuando estaban en ello, notaron dos glándulas, de unos cinco centímetros de largo. Estaban discretamente ocultas, específicamente donde las orejas se conectan a la garganta, cerca de la base del cráneo.

Intrigados, disecaron dos cadáveres y confirmaron la presencia del órgano. Luego, informa el medio Live Science, los investigadores tomaron imágenes de 100 pacientes y encontraron que todos tenían las nuevas glándulas.

Ahora bien, de confirmarse este hallazgo, estas glándulas recién descubiertas se suman a otros tres conjuntos de glándulas salivales más grandes. Se ubican, de acuerdo a Science, debajo de la mandíbula, debajo de la lengua y un tercero cerca de las orejas.

Asimismo, hay alrededor de 1.000 glándulas menores que cubren la boca y la garganta, pero son difíciles de localizar.

A propósito de las glándulas salivales, un dato curioso: todas estas glándulas producen un total de un un litro de saliva diario.

Ahora, ¿cómo unos investigadores que investigaban un tipo de cáncer se dieron con este posible nuevo órgano del cuerpo humano? La conexión es directa: cuando los oncólogos tratan a pacientes con cáncer, intentan proteger las glándulas salivales de la radiación para evitar problemas para tragar y una posible sequedad bucal crónica. Como los médicos nunca supieron que existían estas glándulas, nunca las protegieron.

Finalmente, clasificar estas glándulas como nuevos órganos aún está en debate en la comunidad científica. Algunos expertos dejan abierta la posibilidad de que sean solo glándulas menores captadas en mejor resolución por el escáner empleado. Nuevos estudios darán el veredicto definitivo.