La idea de que China no tiene límites parece ser cierta. Ahora ese país pretende controlar las lluvias y aunque parezca un plan de ciencia ficción, el hecho es que al parecer está cerca de lograrlo.

Desde hace ya varios años se ha experimentado con diferentes ideas para inducir a que llueva en un área concreta o por lo contrario evitar que lo haga. Por eso, la apuesta del gigante asiático en esta área de investigación es fuerte y para dentro de cinco años esperan controlar las lluvias en más de la mitad de su territorio.

En un comunicado oficial del estado el país asiático reveló estos días sus planes para expandir de forma considerable el programa experimental de modificación meteorológica. Quieren cubrir con él un área de 5,5 millones de kilómetros cuadrados. Para ponerlo en contexto, el país tiene unos 9,5 millones de kilómetros cuadrados de superficie.

• ¿EN QUÉ CONSISTE EL PLAN? 

De forma concreta, en provocar lluvias y nevadas. Basándose en la idea de que controlando esto de forma artificial se puede proteger mejor la agricultura del país impidiendo que la lluvia (o su ausencia) dañe los cultivos, esenciales para el país. Indican que con esto también ayudarán a ofrecer ayudas en caso de emergencias por desastres naturales, incendios forestales que apagar, producción agrícola, sequías y más.

• UN PLAN MÁS SENCILLO DE LO QUE SUENA

Alejado de lo que se cree, provocar lluvias es relativamente sencillo una vez se conoce cómo funcionan las nubes. La clave está en inyectar pequeñas cantidades de yoduro de plata en las nubes con mucha humedad para conseguir que se condense mejor y provoque su caída en forma de precipitación. Los experimentos realizados hasta ahora señalan que puede funcionar si se hace de la forma adecuada.

De hecho, desde 2012 hasta 2017 China invirtió más de mil millones de dólares en programas de modificación del clima y en años posteriores esa acción se replicó. Esta cifra ahora sube aún más con la última inversión y de cara a los próximos cinco años. Sin embargo, no es sólo cosa de China, en Estados Unidos por ejemplo también han experimentado con ello.

Volviendo al caso de China, hay una preocupación extra acerca de este proyecto. Si bien tiene un enfoque nacional y las áreas que cubre están en su territorio, esto no impide que afecte a países vecino. Provocar que la lluvia de unas nubes caiga en tu país significa evitar que esas nubes lleguen al país vecino por ejemplo.