¿Te fascinan los vestidos o blusas con escotes y aberturas en la espalda, pero por miedo a que sean notorias algunas manchas, arrugas o flacidez en estas áreas, has dejado de utilizar estas prendas? Para que nunca más te ocurra esto, es importante prestar atención a estas zonas generalmente olvidadas, detalla Gisel Salvador, dermocosmiatra y esteticista.

Por eso, existen diversos tratamientos preventivos y, si ya existe el daño, para poder contrarrestarlo, sin necesidad de recurrir a la cirugía estética. 

Escote y cuello

- Como medida preventiva para evitar las arrugas y flacidez, opta por la mesoterapia virtual con electroporador o corrientes galvánicas. Se procede a colocar principios activos como colágeno, silicio orgánico y proteoglicanos) . Con la aparatología se fragmentan las sustancias para que penetren en las capas profundas de la dermis, estimulando las fibras de colágeno y elastina. Es indoloro y apto para todo tipo de pieles.

- Para la flacidez leve, radiofrecuencia tripolar y ultrasonido. Con la aplicación de energía en la piel, se tensa el tejido muscular obteniendo como resultado un efecto lifting. También se colocan cocteles con principios activos ‘anti age’ como el proteoglicano, caviar, y resveratrol. Se aconseja recurrir a esta opción a partir de los 40 años.

- Para arrugas y flacidez grave se aplica de forma inyectable el plasma rico en plaquetas. Para obtenerlo, se extrae sangre del paciente y se la centrifuga para obtener solamente dicho componente. También se lo puede fusionar con vitamina C y ácido hialurónico para obtener una hidratación más profunda y elasticidad, además para lograr un efecto regenerativo y aumenten los niveles de antioxidantes. Se requieren en promedio cuatro sesiones cada 21 días.

En la espalda

- La pigmentación por las secuelas del acné, se elimina con mascarillas despigmentantes, como las de fresas, carbón activado y aceite de argán. Las de caviar nutren y reparan las células ante la pérdida de elasticidad.

- El acné se trata con una terapia descongestiva con oxígeno hiperbárico y aminoácidos. Limpia a profundidad los poros y logra un efecto secativo. Se complementa con microdermoabrasión y si las erupciones son graves, se aplica ácido glicólico que controla la bacteria del acné.