
Universidades locales se fijan el reto de ascender
Cuatro universidades locales están inmersas en un nuevo proceso de evaluación con miras a conseguir la acreditación y/o el ascenso de categoría, según los casos. Un objetivo que pueden cumplir en abril próximo.
La Universidad Agraria del Ecuador (UAE), una de las tres públicas de Guayaquil, va por la certificación; mientras que la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UEES), la Universidad Ecotec y la Universidad Metropolitana del Ecuador (Umet) buscan subir en la clasificación creada en 2013.
Entre 2012 y 2013, el Consejo de Evaluación, Acreditación y Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior (Ceaaces) llevó a cabo una segunda evaluación general de todas las universidades y escuelas politécnicas públicas y privadas.
Lo hizo en cumplimiento de una disposición establecida en la Constitución vigente desde 2008; y recogida también en la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES), aprobada en octubre de 2010, la cual encargó esa tarea al Ceaaces.
Basado en los resultados de esa evaluación, las universidades fueron ubicadas en cuatro categorías, de la A a la D. Las del último grupo, ocho en total, no obtuvieron la acreditación.
Por ello, tenían un plazo de dos años (hasta 2015) para cumplir primero un plan de fortalecimiento y luego someterse a un nuevo examen para alcanzar la certificación de calidad. En caso contrario, según dispone la Constitución, deben salir del sistema universitario.
De las ocho, solo la Universidad Agraria del Ecuador cumplió ese plan en el tiempo previsto y ahora está en un nuevo examen. Las demás pidieron prórroga de un año para completarlo. Es decir, hasta 2016.
Entre ellas, la Universidad de Guayaquil, intervenida desde 2012 por el Consejo de Educación Superior (CES), y cuyos representantes y autoridades han anunciado su propósito de alcanzar la acreditación antes de agosto próximo, en que culminará la intervención.
Pero la institución aún no inicia el respectivo proceso, según indicó el Ceaaces ante una consulta de EXPRESO.
En todo caso, la universidad porteña y todas las ubicadas en 2013 en la categoría D tienen solo hasta este año para presentarse, de manera obligatoria, y aprobar para ascender por lo menos a la categoría C.
Según el Ceaaces, en 2016 desaparecerá la categoría D.
En cuanto a las entidades de las categorías A, B y C, la norma señala que la certificación obtenida es por cinco años, tras lo cual deberán renovarla.
Pero también les otorgaba la posibilidad de desarrollar un plan de mejoras de dos años y pedir una recategorización.
Este es el caso de las otras tres universidades, todas ellas particulares. En total, 14 instituciones del país buscan la recategorización.
Consultadas por EXPRESO sobre las razones que las animaron a asumir ese reto en este año y no esperar al 2018, hasta el cierre de este artículo solo la UEES explicó sus motivos. (Ver entrevista adjunta).
En general, la evaluación institucional tiene un modelo similar al de 2013, el cual estaba dividido en seis criterios o aspectos: organización, academia, investigación, vinculación con la comunidad, recursos e infraestructura y estudiantes.
Cada uno tiene a la vez un listado de indicadores y porcentajes mínimos que deben ser cubiertos y demostrados para obtener la certificación. Por ejemplo, Academia incluía, entre otras cosas, el número de maestros titulares a tiempo completo o el de docentes con título de maestría o doctorado (PhD). Investigación medía el número de estudios y las publicaciones en revistas científicas.
Según el Ceaaces, ya hay un informe preliminar entregado a las universidades, por lo que prevé que en abril se conozcan los resultados definitivos.