Quince comunidades del cantón Chunchi siguen incomunicadas debido a los deslizamientos que se han suscitado en esa parte de la provincia de Chimborazo. El mayor de los deslaves se produjo el 25 de abril y dejó cinco fallecidos.

Por ahora, las vías no se han reabierto, pese al pedido de los comuneros que reclaman el paso para transportar los productos agropecuarios con los que se ganan la vida; mientras, las actividades educativas seguirán suspendidas hasta el próximo viernes.

Estas medidas obedecen a un tema técnico. Personal de la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR) ha permanecido en el sector durante las últimas semanas. Ayer socializaron a los habitantes de las comunidades afectadas la evolución de las amenazas y riesgos que todavía persisten en la zona: “Las grietas en la parte alta cada vez son de mayor tamaño”, les advirtieron.

Pablo Morillo, director de la SGR de la Zona 3, indicó que los problemas viales persisten en la provincia a causa de la lluvia. “Hemos tenido inconvenientes en varios puntos. La vía hacia Cuenca permanece cerrada, mientras que la Balbanera-Cumandá fue afectada por un deslizamiento que permite tenerla parcialmente habilitada”, indicó.

Toda la atención se ha fijado en la emergencia que vive el cantón y la prioridad por ahora es la habilitación de las vías. “Los habitantes necesitan comercializar sus productos, pues Chunchi es eminentemente agrícola y lechero. Pero también debemos analizar toda la información científica y técnica para tomar la mejor decisión y garantizar la seguridad de la población”, resaltó Murillo.

La sesión del COE provincial, que debía reunirse la tarde de ayer para tratar este tema, se suspendió por falta de quorum. La cita se trasladó para hoy, a las 14:00. PO