El Ejército de Mali mató a decenas de presuntos terroristas que atacaron sus posiciones en la localidad de Labbezanga, situada a 2 kilómetros de la frontera con Níger, donde se refugiaron algunos de los asaltantes que sobrevivieron al ataque.

Según informaron a EFE este 7 de marzo fuentes locales y de seguridad, el ataque ocurrió el miércoles y lo protagonizaron hombres fuertemente armados a bordo de vehículos todo terreno y en motocicletas.

Las fuentes indicaron que los militares malienses estaban alertados desde hacía días de la posibilidad de un ataque, por lo que respondieron con rapidez y además se beneficiaron de apoyo aéreo para luchar contra los asaltantes.

El Estado Mayor maliense no ha informado de este ataque ni dado cifras de muertos o heridos en sus filas, algo que es habitual desde hace unos meses, pero fuentes en el terreno cuantifican en decenas los asaltantes muertos. Dichas fuentes aseguran que otros huyeron a territorio nigerino.

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En redes sociales, circulan vídeos y fotos sin verificar del asalto en las que aparecen militares malienses respondiendo desde sus puestos con armas automáticas y los cadáveres y motocicletas de los presuntos terroristas.

Por otro lado, el Estado Mayor de Mali sí informa este 7 de marzo en un comunicado de otro ataque de "grupos terroristas" a un centro de detención de Niono, en el centro del país.

El Ejército indica que rechazó el ataque, que "varios terroristas fueron neutralizados" y que se incautaron armas y un vehículo.

En la misma nota da cuenta de otro ataque ocurrido en la mañana de este 7 de marzo en el puesto fronterizo de Kouremale, situado a 110 kilómetro al suroeste de Bamako en la frontera con Guinea, pero que solo causó daños materiales.

Este país de la inestable región del Sahel, gobernado por una junta militar golpista desde 2020, es escenario de ataques terroristas continuos perpetrados por el Estado Islámico (EI) y la filial local de Al Qaeda, denominada el Grupo de Apoyo al Islam y a los Musulmanes (GAIM).

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En los últimos meses, reacciones imprecisas e indiscriminadas del Ejército maliense, apoyado por los mercenarios rusos de Wagner, han provocado además masacres en las filas de civiles denunciadas por instituciones como la ONU.

Según la plataforma 'Armed Conflict Location And Event Data Project' (ACLED), que monitoriza la violencia en el mundo, en 2023 murieron 3.364 personas en Mali por ataques de grupos no estatales y otras 2.244 a manos de fuerzas estatales.

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