El director de orquesta ecuatoriano, José María Álvarez, recibió prolongados aplausos en su concierto de gala "Magnificat anima mea", que se llevó a cabo en el Teatro Monumental de Madrid.

Desde 1996, radica en España, pero antes estudió y forjó su profesión en Moscú, Rusia. Con una exitosa carrera en el extranjero, Álvarez se siente orgulloso de sus raíces. "Como ecuatoriano en España, siempre llevo mi Patria dentro de mí y espero poder regresar a Ecuador y contribuir con un trabajo que promueva el crecimiento cultural en nuestro país", señaló.

El espectáculo, que fue disfrutado por cerca de 1.000 personas, contó con la participación de solistas, orquesta y coros de voces blancas y adultas. 

"Estamos muy felices de poder difundir la cultura más profunda de la música clásica, especialmente en este teatro, que es uno de los tres más importantes de Madrid. He ofrecido un concierto que consta de dos obras barrocas. La primera de ellas es un estreno en España, una obra que nunca antes se había interpretado aquí, del compositor alemán Johann Kuhnau, titulada "El Magnificat". También interpreté otro Magnificat del compositor Johann Sebastian Bach. Son obras sacras en el contexto navideño y ha sido realmente una oportunidad maravillosa", indicó el artista ecuatoriano.

José María es profesor superior de Dirección de Orquesta, Coro y Ópera graduado del Conservatorio Superior Tchaikovsky de Moscú, y obtuvo su Doctorado Cum Laude en la Universidad Autónoma de Madrid. Ha trabajado como director de orquesta y profesor en seis conservatorios de la capital española.

Actualmente es director de la Orquesta y Coro de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y director del Coro de la Universidad CEU San Pablo. Ha realizado giras internacionales por Italia, Alemania, Ecuador, Argentina, Polonia y Reino Unido. Además, es socio fundador y director artístico de la empresa de gestión de música clásica MUSIC’us. En los últimos años, ha recibido 25 premios en diversos certámenes. En enero de 2013, fue condecorado por la Asamblea Nacional de Ecuador con la distinción al mérito artístico 'Vicente Rocafuerte'.

La ministra de la Embajada de Ecuador en España, Verónica Peña, quien tuvo la oportunidad de asistir al evento, se sintió conmovida y considera a Álvarez un orgullo nacional. “Estoy sin palabras. Muy emocionada de ver un concierto maravilloso. Estoy a flor de piel y orgullosa como nunca antes. José María Álvarez merece estar donde está. ¡Arriba Ecuador con esa presentación! Además, ese concierto fabuloso compartido con un maestro joven austriaco que es una maravilla. Los grandes comparten con los grandes”, afirmó.

El debut del director austriaco Maximilian Khevenhüller también fue recibido con ovaciones. "He tenido una carrera en composición y piano colaborativo. Uno de mis objetivos es compartir la belleza de la música clásica, que a menudo se encuentra en la música sacra. Es un honor para mí comenzar con dos compositores de mi país, Haydn y Mozart”, comentó.

La presentación artística tuvo dos partes: la primera fue dirigida por Maximilian Khevenhüller Metsch, quien hacía su debut como director en este concierto. Las obras interpretadas fueron la 'Pequeña misa para órgano 'San Juan de Dios' de Joseph Haydn, y 'Laudate Dominum' de W. A. Mozart. La segunda parte estuvo a cargo del guayaquileño José María Álvarez, quien dirigió 'Magnificat' de J. Kuhnau y el 'Magnificat' de J. S. Bach.

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