Elecciones. Alejandro Domínguez ocupaba el cargo interino en el organismo por Napout. Ayer en los sufragios fue respaldado.

Los Huaorani temen otro enfrentamiento con los Taromenane

Preocupada. La comunidad Huaorani teme un nuevo enfrentamiento con miembros del grupo de indígenas no contactados Taromenane. ¿La razón? Vengar la muerte de uno de los suyos ocurrida el 25 de enero pasado. Caiga Baigua fue atacado cuando se movilizaba por el río Shiripuno, cerca de Bameno, en Orellana. La agresión se atribuyó a los Taromenane. Luciana, su esposa, fue herida. Está asilada en el hospital Eugenio Espejo, de Quito. La Fiscalía investiga y la mujer ingresó al Programa de Protección de Víctimas y Testigos. Alicia Cahuiya, vicepresidenta de la Nacionalidad Huaorani, pide una solución definitiva. ¿Cuál es? Un territorio para los Huaorani y otro para los Taromenane, dice. Ella advierte que si en los próximos 15 días no hay una respuesta oficial al conflicto, se perderán más vidas. “Si no arreglan, va a empezar a pasar como en Yarentaro: matar entre familias”, pronosticó. La dirigente atribuye el origen de los incidentes a que “se extendió la frontera petrolera”. El 28 de enero, en El Coca, Alexandra Jaramillo, ministra de Justicia (e), se reunió con familiares de las víctimas del ataque. Según un comunicado de esta dependencia, el encuentro “evidenció el interés de este Gobierno por mantener la paz entre estas comunidades”. Ramiro Ávila, abogado de los Yasunidos, informó que solicitaron a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) una actualización de las medidas cautelares concedidas en favor de ambos grupos indígenas para “evitar una nueva masacre”. MCV