Entrevista a Germán Rodas

Es el coordinador de la Comisión Nacional Anticorrupción. Es historiador y escritor con una maestría en la Universidad La Habana, en Cuba. Ha escrito varios libros sobre la realidad latinoamericana. Miembro de la Academia Nacional de Historia y ha sido distinguido con varias condecoraciones.

El contexto

En este mes de mayo la Comisión Nacional Anticorrupción cumplió seis años de actividades. En este tiempo los comisionados han presentado denuncias por actos de corrupción en el régimen de Correa.

La semana pasada un juez de Pichincha ratificó la inocencia de Germán Rodas, el coordinador de la Comisión Nacional Anticorrupción. Había sido demandado por injurias por un proveedor de insumos médicos. Todos los miembros se presentaron como testigos. Ocurrió en el mes de su sexto aniversario.

Un proveedor lo demandó por injurias.

El juicio en realidad fue un pretexto de algunos grupos que están vinculados con las ventas de insumos, pero lo que querían era no solo acallar la voz del coordinador sino de la Comisión Nacional Anticorrupción. La justicia prevaleció sobre la delincuencia organizada de la venta de insumos médicos.

Además de esta demanda, como Comisión, ¿qué otras acciones han recibido?

A lo largo de los seis años de la Comisión hemos enfrentado no menos de unos 10 o 12 juicios con pedidos de indemnización. En un momento dado la Comisión debía como 60 millones de dólares porque nos demandaban con pedidos de indemnización. Es decir, todas las acciones para impedir nuestra opinión pero hemos hecho todo para cumplir con nuestra tarea de fiscalización. Pretendieron castigarnos porque nuestras denuncias siempre fueron entregadas ante los organismos de control respectivos, particularmente en la Fiscalía.

¿Qué ha sido lo más difícil que les ha tocado enfrentar?

Hay dificultad en la entrega de alguna información específica pero a mí me parece que la mayor dificultad es la lentitud de los procesos frente a nuestras denuncias. Hay varios asuntos que hace años fueron reconocidas las firmas y no se han movido los procesos.

Por ejemplo en qué casos. Ustedes denunciaron Refinería del Pacífico, Caminosca...

En el tema de Odebrecht no avanzamos nada. Es todo un conflicto de cosas alrededor porque se manejan como 6.500 millones de dólares y hay otros temas que evidentemente no se han movido: Caminosca, los helicópteros Dhruv, el tema del general Gabela, es decir, hay lentitud, hay muchas cosas que van absurdamente lentas y hay otras en las que en algunas dependencias reconocimos las firmas.

¿Han tratado de reunirse con la Fiscalía para expresar sus preocupaciones?

Estamos haciendo gestiones desde algún tiempo para poder conversar con la fiscal, se vuelve fundamental aquello.

Usted es el segundo coordinador de la Comisión, ¿cómo han sido estos seis años?

Ha significado una tarea ardua porque no recibimos recursos de nadie, ni del Estado ni de ningún sector privado. Primero es un desgaste constante y preocupaciones pero hay la satisfacción que la lucha contra la corrupción se ha constituido en un tema de los propios requerimientos de la sociedad frente al Estado y frente al país, hay una conciencia de la importancia de la tarea anticorrupción y hablo de la tarea seria, no de la acción mediática, ni de la foto.

Están en todo el país.

Hemos fortalecido los núcleos provinciales, es una tarea en la que hombres y mujeres, con mucha probidad, se han sumado en provincias. Todos preocupados de castigar la delincuencia organizada que no está presente solo en los últimos años sino los tres últimos lustros en los que fue un ataque constante. En las provincias han fiscalizado alcaldías.

¿Y en el gobierno de Lasso?

Desde luego, porque es una tarea para fiscalizar al poder y nos permite aquello las normas constitucionales. Aspiramos seriamente que entremos a un ciclo distinto en esta materia. Lo que sí ocurrió es que Alianza PAIS en sus dos versiones, correísmo y morenismo, le han metido la mano al bolsillo, por eso es que en este gobierno no hubo la cirugía mayor contra la corrupción.