La tarde de este domingo 1 de octubre se informó del hallazgo del cadáver de un hombre que yacía flotando frente a las costas de la isla Puná. La novedad fue reportada a las autoridades por pescadores de la Península de Santa Elena que se encontraban en faenas en la citada área.

Se presume que el cuerpo corresponde al artesano Roberto González, otro pescador de la población de Anconcito, quien se encontraba desaparecido desde el pasado 15 de septiembre cuando se dirigía mar adentro a la captura de dorado y albacora.

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El día en que González salió a laborar a bordo de la lancha ‘Mi quiteñita’ estuvo acompañado de sus amigos Eduardo Mantuano y Stalin Rodríguez, quienes fueron asesinados a balas y arrojados al mar. La semana pasada se encontró a los otros dos cadáveres.

“Por la ropa y las características del cuerpo presumimos que es Roberto. Los malditos delincuentes mataron a los tres”, señaló un allegado de González, quien gestionó desde el muelle del puerto el traslado del cuerpo hacia Anconcito para que se efectúen las pericias y se confirme la identidad.

El dolor y la rabia que se vive en Santa Rosa y Anconcito, en la provincia de Santa Elena, es intenso por el crimen de los tres artesanos.

Con temor, pescadores y demás ciudadanos que laboran en altamar comentan que están cansados de las bandas de piratas que los acechan.

“Son Los Lobos y Los Choneros que se han apoderado de los puertos de la Península. Te amenazan si no les pagas las vacunas, te roban o te matan. La gente sabe quiénes están atrás de estos, pero temen por las represalias”, manifestó atemorizado un pescador.

Según una fuente investigativa, las dos bandas se dedican a extorsionar a los pescadores en el Litoral. Indicó que en la mayoría de los puertos de la península opera la banda delictiva Los Choneros y ahora, expresó, quieren entrar Los Lobos.

Por eso ya se han dado enfrentamientos a balas en el mar y en tierra como lo que ocurrió en agosto en Chanduy.

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Los pescadores pagan a Los Choneros para no ser víctimas de robos y para recibir protección de ellos, señaló la fuente.

En los últimos meses Los Lobos han empezado a robar también a los pescadores. “Los atracos siguen en el mar porque los artesanos se niegan a pagar otra vacuna”, manifestó.

“Quizás los compañeros se negaron a pagarles y por eso les robaron la lancha, el motor, y no contentos, los asesinaron. No tenemos autoridad que nos defiendan”, indicó un familiar de los fallecidos.

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