Si el termómetro fuese la votación del informe no vinculante de la comisión ocasional multipartidista, aprobado a inicios de marzo, se podría decir que la suerte del presidente Guillermo Lasso está echada y él censurado y destituido con más de los 92 votos necesarios.

Sin embargo, los cerca de 45 días que se vienen serán vitales para la oposición en el objetivo de conservar esas 104 voluntades, así como para el Gobierno de revertir la tendencia y ‘salvar’ al primer mandatario.

Si se puede hablar de votos fijos en la Asamblea, entonces habría que sumar los 47 de la bancada de Unión por la Esperanza (Unes) a los 15 que tiene el Partido Social Cristiano (PSC) bloques que, independientemente de posturas individuales, por lo general actúan de forma orgánica.

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Así, también orgánicos, se esperaría que voten en contra de la destitución del mandatario los 22 integrantes de la oficialista Bancada del Acuerdo Nacional (BAN), aunque cuando se aprobó el informe no vinculante, se ausentaron cuatro de ellos.

El ‘enredo’ en los cálculos viene cuando se habla de los bloques de Izquierda Democrática (ID), Pachakutik y los independientes que si bien, en su mayoría, votaron a favor de la sugerencia de llevar al presidente a juicio político ahora que esto se concretó, son más cautos sobre cómo será su votación.

De los 25 miembros de la bancada de Pachakutik se podría decir que unos seis que responden a la Conaie no dudarán en apoyar el impulso correísta por censurar al presidente Lasso. El resto aún es una incógnita pese al discurso beligerante.

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Antes del pronunciamiento de la Corte Constitucional admitiendo el pedido de juicio político, el Consejo Político de Pachakutik se reunió y ya tomó la decisión de poner los votos para la destitución del presidente, informó el jefe de ese bloque, Mario Ruiz.

Sin embargo, hay condiciones. “Habrá que ver cómo viene de la Corte Constitucional, porque no ha hecho ninguna valoración respecto al fondo, causales, pruebas. Entonces, habrá que ver qué pruebas presentan en la Comisión de Fiscalización y canalizar en su oportunidad (…) ustedes vieron cómo presentaron la demanda”, cuestionó Ruiz.

La ID es otro misterio con sus dos o más facciones en la Asamblea. Una de ellas, que suma una decena de legisladores, tiene a Rodrigo Fajardo como uno de los proponentes del juicio político y estaría por la censura y destitución.

Otra, que sigue la línea del director nacional del partido, Enrique Chávez, estaría en contra de cesar al presidente. “El país no necesita caer en una inestabilidad política como en la década de la novena con cambios de presidentes, en donde se reunían asambleístas golpistas y tumbaban presidentes”, le dijo Chávez a EXPRESO.

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El círculo se cierra con los 13 independientes que se podrían dividir en apoyo o rechazo al juicio político. Cuando se aprobó el informe de la comisión multipartidista unos votaron a favor, otros se abstuvieron y un buen número ni asistieron.

Con ese panorama, el presidente Lasso confía que los asambleístas tomarán decisiones individuales una vez que presente, durante tres horas, sus pruebas de descargo ante el pleno, pero también cuando revele los supuestos vínculos de legisladores con el crimen organizado.