El sector petrolero no atraviesa su mejor momento. Los daños ocasionados en el Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE), por un deslizamiento el 7 de abril, provocaron que el país tenga que negociar con todos sus clientes y acreedores. Los principales compradores de crudo ecuatoriano tuvieron que sentarse a negociar con Petroecuador para llegar a un acuerdo.

Luego de intensas negociaciones, Petrochina y Petrotailandia aceptaron un cambio en el cronograma de entregas sin cargarle multas a Ecuador. Las dos empresas asiáticas compraron anticipadamente el petróleo durante el gobierno del expresidente Rafael Correa.

Esas operaciones, como dato adicional, estuvieron plagadas de irregularidades que ahora son investigadas por la Fiscalía General del Estado.

Pablo Flores, gerente general de Petroecuador, explicó que Ecuador no entregará crudo prevendido este mes. En el mejor de los escenarios, los más de 3,4 millones de barriles que debían llegar a China y Tailandia arribarán en mayo.

¿Cuál fue el acuerdo? Los compradores anticipados debían recibir 2,1 millones de barriles de crudo Oriente y 1,3 millones de barriles de crudo Napo en este mes. Eso no será posible porque el SOTE estará listo, en el mejor de los casos, a finales de esta o la próxima semana. El inicio de operaciones de transporte de crudo quedaría para los primeros días de mayo.

Ese transporte sería limitado y para cumplir con las demandas de China y Tailandia no se enviará petróleo a la Refinería de Esmeraldas.

Lo dicho no representa un problema significativo porque la demanda de combustibles en el país ha caído considerablemente por la emergencia sanitaria derivada del coronavirus.

Petrochina y Petrotailandia tampoco tienen una demanda alta de crudo y por eso aceptaron el aplazamiento hasta la primera quincena de mayo. No habrá multas ni cargos adicionales por las demoras. Claro que, si las reparaciones del Sistema de Oleoducto no se repara hasta el 30 de abril, el retraso sería mayor y las empresas asiáticas podrían emprender acciones en contra del Ecuador por incumplimiento de contrato. El país, ahora, atraviesa una situación de Fuerza Mayor.

Los acuerdos de venta anticipada, firmados por el gobierno correísta, benefician ampliamente al comprador y limitan las ventajas del Ecuador. Como ejemplo, hasta 2018, el país recibía castigos y precios afectados por cada barril de petróleo que entregaba.

Para este año, según los acuerdos del correísmo, Ecuador tenía más del 100 % de su producción de petróleo comprometido a los compradores anticipados. Apenas a inicios de año se logró una renegociación para liberar barriles para comercializarlos a precios más justos.