
¿Aumentará el uso de Temu? Ecuatorianos opinan sobre el nuevo arancel del 4x4
Ecuador aplicará desde el 16 de junio un arancel fijo de $20 por paquete a las compras bajo el sistema courier 4x4.
Desde mediados de junio, todos los paquetes que ingresen a Ecuador bajo el régimen courier 4x4, el mecanismo que permite importar compras personales de hasta 4 kilogramos y 400 dólares, estarán sujetos a un arancel fijo de $20. La medida, anunciada por el gobierno, tiene como objetivo frenar el uso indebido de este sistema que, según datos del Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, ha sido aprovechado en un 88% de los casos para fines comerciales durante 2024, representando más de $440 millones en importaciones.
El argumento oficial: frenar el uso indebido del sistema courier
El viceministro Andrés Robalino explicó que detrás de muchas de estas importaciones hay redes informales que utilizan cédulas de terceros, muchas veces sin su consentimiento, para ingresar grandes volúmenes de mercancía. “Hay couriers que están operando de forma ilícita, beneficiándose del uso fraudulento de este régimen”, advirtió.
Sin embargo, la decisión de aplicar el nuevo arancel ha abierto el debate en varios sectores de la sociedad, sobre todo entre consumidores frecuentes de plataformas internacionales como Temu, Shein o Amazon, quienes han encontrado en el comercio electrónico una alternativa para adquirir productos que no siempre se encuentran en el mercado local.
El dilema: proteger la industria o impulsar la competitividad
Para María José Gavilanes, ingeniera en Negocios Internacionales, la medida tiene efectos ambivalentes. “A opinión personal creo que esta medida divide un poco la expectativa de la sociedad. Por una parte, está la industria local, que con esta medida lo que hace es un poco de refuerzo, porque claro, también han habido muchas personas que han traído estos pedidos no solamente uno, sino cinco o diez. Esto afecta al consumo interno: si la gente consume menos, la demanda disminuye y eso genera un exceso de oferta en el mercado local”, sostiene.
Desde su perspectiva, la intención del gobierno es proteger a los pequeños productores nacionales que ven en el crecimiento descontrolado de estas importaciones una competencia desleal. “La gente que tenía por costumbre traer en diferentes fechas muchos pedidos, ahora va a pensar a lo mejor en comprar algo local y ya no pedir desde afuera”, añade Gavilanes.
Por su parte, Lilibeth Suazo, especialista en Marketing Empresarial y comercio electrónico, advierte sobre el posible impacto negativo de esta medida sobre el ecosistema digital emergente. “En Ecuador, el comercio electrónico venía creciendo de forma sostenida, impulsando el acceso a productos, conectando a emprendedores con nuevas oportunidades y facilitando la inclusión digital. Este tipo de medidas puede frenar ese avance, afectando tanto a consumidores como a pequeños negocios que dependen de estos canales para abastecerse o crecer”, explica.
Para Suazo, el verdadero desafío no está en restringir las compras externas, sino en fortalecer la competitividad de la producción nacional. “Lo que realmente se necesita es invertir en innovación, procesos más eficientes, tecnología y acceso a herramientas globales. De lo contrario, caemos en una protección superficial que no resuelve el problema de fondo y que desconoce la realidad de un mercado global y centrado en el consumidor”, concluye.