Nueve indicios balísticos están bajo el análisis de los peritos de Criminalística para determinar qué tipo de armas se usaron en el asesinato de Julio Javier Paredes Zamora, en el parqueadero de un centro comercial de la parroquia La Aurora, en Daule, provincia del Guayas.

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La víctima, de 33 años, en la madrugada del miércoles 3 de abril cuando salía del centro comercial para embarcarse en su vehículo se topó con seis sujetos que se bajaron rápidamente de una camioneta doble cabina color blanco, que estaba a diez metros de su automotor y le descargaron más de cuatro disparos en su cabeza y tórax, dejándolo gravemente herido.

Mientras los desconocidos fugaron a gran velocidad con dirección a la avenida principal de la parroquia, ante la mirada atónita de los guardias de seguridad, que no pudieron hacer nada para detener a los sicarios.

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Los familiares de Paredes lo llevaron a una clínica privada para tratar de salvarle la vida, pero sus esfuerzos fueron en vano. Los galenos de turno confirmaron que ya no tenía signos vitales. Julio ingresó con varios familiares al centro comercial, para celebrar el cumpleaños de un allegado, y al momento de dirigirse a su domicilio fue interceptado. “Los asesinos lo estaban esperando en el parqueadero, al parecer desde temprano le seguían los pasos”, enfatizó una fuente policial. 

El teniente coronel Carlos Mancheno Enríquez, jefe encargado del distrito policial de Daule, confirmó a EXPRESO que la víctima registra 11 antecedentes penales por los delitos de tenencia de armas no autorizadas, robo, posición ilícita y agravantes. “(...) No existió robo, con la explotación de cámaras, trataremos de identificar a los asesinos”.

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