Una dirección o cualquier contrato para los caramelos, pedía el señor Grijalva. Una de las conversaciones que mantenía Mayra Salazar con uno de sus contactos de WhatsApp, al que tenía agregado como Carlos Grijalva, exponen el tipo de favores que se pedían mutuamente, a corto o mediano plazo. Todo dependía de cuán bien le vaya a Mayra Salazar; una de los 52  procesados por delincuencia organizada en el caso Metástasis; y quien ha sido pieza clave para hilar una nueva investigación a la que el Ministerio Público ha denominado Purga. 

Salazar, ex asesora de presidencia en la Corte Provincial del Guayas, y conocida ante la prensa por su experiencia como relacionista pública, hablaba con Grijalva a menudo. En uno de los chats develados por el Ministerio Público, que datan del 29 de julio de 2023, ambos intercambian porcentajes sobre como se repartiría un contrato de limpieza.

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"Es la última reunión para cuadrar la compra de limpieza. Eso me dice mi amigo, para que se compre martes o miércoles. Quiere ya quedar de acuerdo con todas las partes; la tuya y la de él", escribió Grijalva a Salazar. La relacionista pública de la Corte, respondió y aclaró, con una suma de números lo que se haría: "Quedamos tal cual: de los 10, nos daba dos. De los ocho, el recibe 3.5; el día que lo siente. Entre tu y yo, aparte, esta el cinco, más dos, nos dividimos siete. Pero eso no puede saber él. Eso está claro".

Después de aquella conversación entre ambos, Grijalva sacó sus conclusiones: "Si gana Luisa, has de tumbar durísimo". Un mensaje que llegó a Salazar 22 días antes de que en Ecuador se celebraran las Elecciones anticipadas 2023, en las que uno de los candidatos con mayor aceptación, según las encuestas realizadas, era Luisa González, del correísmo. 

Y como si de un deseo a Papá Noel se tratara, Carlos Grijalva le pidió de regalo a Mayra Salazar una "ínfima (contrato) vaga, para tener para los caramelos". La relacionista pública respondió con una mejor oferta: "vamos a trabajar juntos". 

Días después de acordar cómo se repetirían lo que parecía un contrato de limpieza, Salazar le escribe a Grijalva, el 2 de agosto de 2023, para pedirle un favor: "Oye, hazme roles de pago, por fa". Él responde a Salazar con varios mensajes de audio, con los que parecería excusarse por no atenderla pronto, pues Salazar continuó el chat con un "eso, trabaja, trabaja".

Grijalva no bromeaba con la idea de obtener algún tipo de beneficio en el sector público a través de Salazar. Pues luego de aquel mensaje, el sujeto advirtió: "Mínimo quiero un puesto de director nacional en el SRI, para llevarme en peso esa dirección". Adjuntando dos archivos que tenía como descripción: "Alumno en espera de diploma- Carlos Oswaldo Grijalva Borbor".

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Según la Contraloría General del Estados, en las declaraciones juradas, Carlos Grijalva fue secretario técnico en el Servicio Nacional de Rentas Internas (SRI) de 2015 a 2016, y cuenta con una licenciatura en ciencias de la educación. También un diplomado en informática. 

Grijalva es uno de los miles de contactos con los que la relacionista pública intercambiaba información de "sus negocios" o estrategias para ganar algún tipo de rédito. Salazar dará su testimonio anticipado este 28 de marzo ante la Corte Nacional. El juez de sala penal, Felipe Córdova, acogió la solicitud de la fiscal Diana Salazar, quien el pasado 15 de marzo, solicitó otorgar una fecha para que la exasesora de la Corte rinda su versión.

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